lunes, 31 de diciembre de 2007

NOCHE VIEJA EN LA TIERRA

Happy night & sweet hankover

LO HERMOSO Y LO PATÉTICO, por Inma Luna.


No es fácil distinguir lo hermoso de lo patético.

Puede ser una borracha cualquiera. Una borracha gorda y bajita con los ojos medio cerrados. Apenas alcanza a acodarse en la barra y sujeta su cubata con las dos manos. De vez en cuando se separa un poco, intenta algún paso de baile. Quiere bailar flamenco y levanta los brazos sin gracia ninguna, con las muñecas hacia abajo. Lleva un pantalón negro y un plumas del mismo color abrochado hasta el cuello. Ni siquiera eso parece quitarle el frío. Podría ser sudamericana. Lo es. Me dice –escupe mucho al hablar- que las españolas llevamos el flamenco en la sangre, lo dice haciendo el gesto de inyectarse algo en las venas. Le digo que se anime, que baile. Se llama Marisa. Intenta llevar el ritmo de la música pero pronto se da por vencida y regresa a la barra.

Me acerco y no tarda un minuto en empezar su historia. Le cuesta un poco vocalizar pero la entiendo: Mira, mamita, te digo algo, soy ecuatoriana y, mamita, llevo aquí nueve años, mira mamita, esto es una puta mierda. Yo, te lo digo porque se te ve buena, mamita, porque bailas mu bien, yo trabajo en un club, mira esto no lo cuentes, pero así como me ves, gordita y eso, gano mucho mamita, soy la que más gana, pero hoy estoy mala y he llamado y he dicho que hoy no iba, mamita, que hoy es Nochebuena, y yo tengo dos niñas gemelas de tres años, que están con su abuela en mi país, y mi jefe me ha dicho, mamita, que malos estamos todos, joder mamita es un hijoputa.

Marisa llora como si no llorara, sólo le caen las lágrimas por la cara pero sigue hablando sin sollozar.

Mira mamita este país está lleno de cabrones de mierda. El otro día cogí un taxi cuando acabé de trabajar porque había ganado mucha pasta y estaba contenta y cuando se me da bien la noche me da la gana y me cojo un taxi, y el taxista me dice, mamita, que si trabajo en el club y le digo que sí, mamita, porque yo no me escondo, y me dice que se la chupe, mamita, el cerdo cabrón, eso no es respeto, mamita, que yo sólo quería irme a mi casa, pagar el taxi, irme a dormir. Yo me espero un año más y luego me largo, yo gano pasta, así gordita, gano pasta y al año que viene lo dejo y me voy con mis niñas, mamita, que para comer y vivir no hace falta mucho, mamita, que yo sólo quiero un poco de respeto.

Colgada de mi cuello, Marisa se arrastra de nuevo hasta la barra, le digo que no se deje humillar, que se sienta tan buena como cualquiera, que se largue en cuanto pueda, coge mi vaso y se lo bebe de un trago.

Cuando me iba le dije a voces: se féliz! –yo también estaba bastante borracha- y me contestó, vete tú pal coño con la felicidad, no te jode.

Inma Luna, del blog De cerca nadie es normal: http://inmalunatica.blogspot.com/

FERRARA: NIHILISMO SANGRIENTO.

Este es el número especial, dedicado a Abel Ferrara, de aquel legendario zine llamado Atrocity Exhibition. José Manuel Vara, hijo de Satanás y guardián de la cripta, lo rescata de la niebla ( aprovechando nuestra reseña de Teniente Corrupto ) y nos recuerda cómo editábamos los drugos del pasado siglo... Sin duda, una delicatessen para coleccionistas. v.

domingo, 30 de diciembre de 2007

El amor, según Märta Tikkanen

A quienes no la conozcan, les presento a la –más que probablemente– mi poeta-hembra favorita: Märta Tikkanen. Al igual que a Mohamed Chukri, la intelligentia editorial de este país la tiene también D-E-S-C-A-T-A-L-O-G-A-D-A… Poseo el –según me aseveraron- último ejemplar que quedaba de su obra capital La historia de amor del siglo (indáguese, búsquese); y me place SOBREMANERA comunicar a cualquier interesado/a, que la tengo bien pasadita y guardada en las entrañas entrañables del disco duro (pero no tanto) de mi ordenador. Como botón de muestra, véase cómo se rumia la finlandesa esta cuestión tan árida y espinosa que hace ya tanto dimos en llamar AMOR, (Pablo G. Bao)


PARA MÍ

el amor no puede ser nunca

dos que se quedan acurrucados

en un rincón

mientras la vida pasa de largo rugiendo

Para mí

el amor tiene que ser siempre

muchos que luchan hombro con hombro

– tú también, yo también –

ahí fuera en mitad de todo

en plena vida

SUNDAY BREAKFAST

Open your eyes

BAD TRIP, por Miguel Ángel Martín.


SECUELA, 1 poema de Sylvia Plath.


Impulsados por el imán de la calamidad

merodean y miran como si la casa

quemada fuera de ellos, o como si pensaran

que en cualquier momento algún escándalo pudiera

escurrirse

de un armario asfixiado por el humo;

ni muertes ni heridas prodigiosas

sacian a estos cazadores de la vieja carnaza,

de rastro de sangre de tragedia austera.


Madre Medea con su túnica verde

se mueve humilde como cualquier ama de casa por

sus estancias en ruinas, haciendo el inventario

de zapatos calcinados, de tapicería empapada:

privada de la pira y la tortura,

la multitud le sorbe la última lágrima y le vuelve la

espalda.

Sylvia Plath, del poemario Soy vertical. Pero preferiría ser horizontal ( Grijalbo Mondadori, 1999 ).

sábado, 29 de diciembre de 2007

SATAN'S MUSIC

Gabba gabba hey !!!

LUCES ESTROBOSCÓPICAS EN NAVIDAD

Un homenaje a Charles Bukowski
C.C.A.N. León, Sábado 29, 21 h.
Entrada libre

CON HANK...¡ EN EL INFIERNO ! Por Ginés Torres García.


Era un domingo por la tarde. Ya sabéis, me debatía entre la indolencia resacosa y esa tristeza insondable tan habitual... Un domingo por la tarde, esa gravedad existencial de tintes solemnes que se instala en la boca de tu estómago y de la que sólo puedes librarte privando sin descanso.
Además, no sabía dónde coño estaba.
Bueno, sí. Era un bar, de eso no cabía duda, y estar en uno de ellos también era algo muy normal en mí. Mi trasero pedorro descansaba sobre un hostil y reducido taburete rompehuevos. Y mis codos se hallaban adheridos a una pringosa barra repleta de botellas y copas. Todo en el maldito garito parecía estar derritiéndose de tanto sudar. Vasos, sillas, paredes, botellas, personas, bombillas, éramos un todo que transpiraba y transpiraba. Una suerte de esponja cósmica que por mucho que abrevaba, no dejaba de expulsar líquidos al exterior.
El calor era insoportable.
Desde luego no parecía un lugar de mucha clase, que digamos.
Mi mirada se encontraba fija en un punto, como intentando adivinar vastos e inexplorados confines entre la botella de Bacardí y la de Anís del Mono. Sacudí la cabeza. ¿ Cómo había llegado hasta semejante antro?
Eso sí, aquello estaba repleto, en especial las mesas dispersas por el local. Rudos motoristas, tipos solitarios de aspecto taciturno, viejos que hurgaban en sus narices mientras libaban, rockeros de todo pelaje
Y yo.
Ahora bien, ni una sola tía a la vista. Ni una mujer entre tanto pelo, tatuaje y testosterona. Ni un triste par de tetas al que aferrarse en la caída
¿Un garito de ambiente, tal vez?
Lo que llamó mi atención fue la palidez de los rostros. Parecían jetas de cera a punto de fundirse bajo el sofocante bochorno. Eché un vistazo a la decoración, en busca de pistas Amenazantes llamas anaranjadas, ribeteadas con amarillos ardientes, se dibujaban sobre las paredes, realzando e intensificando la sensación de ígneo agobio que allí reinaba.
De repente, apareció. Pálido y sudoroso como los demás. Era el bendito camarero.
-¿Qué te pongo?- me preguntó. Parecía cansado, sus ojos se escondían tras unas enormes y anticuadas gafas.
-Vodka seven, por favor. Bien mezclado. Se os ha jodido el aire acondicionado, ¿no? Estoy achicharrándome vivo- pedí y puntualicé. Empezaba a salir de mi extraño letargo.
El tipo combinó con rapidez y habilidad. Depositó el vaso frente a mí dando un golpe.
-Ahí tienes, chico, y no lo derrames sobre tu amigo muerto. Hace siglos que nadie limpia esta barra- el acento del menda delataba su origen. Argentino, fijo. La permanente transpiración provocaba un deslizamiento de sus gafas tocha abajo. Un empujoncito con su dedo índice volvía a auparlas. Entonces reparé seriamente en su frondoso mostacho y su mirada, tierna y lánguida a la vez. Mecagüen, aquel tipo era Raúl Núñez. O su doble calcado. Sólo un gay biker muy pasado se atrevería a ir por ahí con semejante bigotazo. Un gay biker o, claro, Raúl Núñez.
-Coño, tío, eres clavado a un escritor fiambre hace ya mucho. Un argentino que se llamaba Raúl Núñez, no creo que te suene. Nadie se acuerda ya del gran Raúl. – le expliqué.
-No sé de quién me hablas. Yo soy Sinatra, chaval. Hoy no parece ser tu día- me largó antes de ir a atender a otro sediento.
-¡ Pss!¡ Eh, tú, chico!-, alguien me llamaba- ¿ No tendrás un pitillo por ahí, verdad? Me dejé el paquete y el encendedor sobre la mesilla, en la habitación del hospital- no había reparado en él. Se sentaba en el taburete a mi derecha. Un viejo pedo con aspecto de vagabundo. Una poblada barba enmarcaba su rostro, hipnóticamente feo y pálido, asaeteado de cicatrices y perforado por diminutos cráteres. Una jeta de las que no se olvidan. Debía de haber recibido lo suyo. También habría repartido unas cuantas, seguro. Como todos allí, sudaba copiosamente.
Bufé, fingiendo fastidio, luego extraje el paquete y se lo lancé a lo largo de la barra. Pero la abundante y pegajosa porquería lo frenó a escasos centímetros de mí. Me levanté, y fue todo un trabajo con aquel calor del demonio, tiré del paquete hacia arriba y se lo ofrecí en mano al carcamal.
-Gracias- me soltó, tras pillar tres cigarrillos. Se guardó dos en el bolsillo del pantalón y se llevó el tercero hasta la boca- Dame fuego, chico, ya sabes, el hospital- se lo encendí. Dio una ansiosa calada y exhaló un penacho de humo que se diluyó rápidamente en la densa atmósfera del tugurio- Me gusta fumar, el trago y el cigarrillo se equilibran- sentenció. Mientras hablaba, sus ojos permanecían entrecerrados, pero, aún así, su mirada parecía taladrarme en todo momento. Volvió a su copa.
Y yo a mi taburete ahítepudras y a mi vodka seven. Ya no quedaba rastro de los hielos. Habían sucumbido, como todos lo haríamos pronto si alguien no reparaba el puto aire. Esa jeta, esa jeta de boxeador beodo,¡ mecagoenlaputa! ¡ Ese tipo era el doble exacto de Bukowski!
-Viejo, eres clavado a Hank, el escritor americano. Claro que él ya palmó y tal. Pero, joder, eres clavadito, ¿ no te lo había dicho nadie?
-Por qué no pruebas a bajar del taburete y darte unas patadas en el trasero. Es una forma de pasar el tiempo- me soltó, el menda, mientras con su mano derecha se rascaba las pelotas. O lo que tuviese donde debieran estar las pelotas. Del bolsillo de su chaqueta asomaba el Racing Form.
-Vale, viejo, vale. Era sólo por charlar un poco
-Yo no soy buena compañía, hablar no me sirve para nada- me escupió con desdén.
-Pues hablas como un jodido escritor, ¿ no deberías estar ya muerto, Hank? Quizá seas como Elvis...
-La muerte de la mayoría es una farsa, no queda nada que pueda morir. Lo triste no es la muerte, sino las vidas que la gente vive o no vive hasta su muerte- siguió sentenciando quienquiera que fuese. Una mosca revoloteó alrededor de su copa y luego se posó junto al abarrotado cenicero. El tipo alargó la mano y la mosca desapareció- ¿ Abres la boca, chico?- fanfarroneó con el puño cerrado y alzado.
-Y una mierda-protesté, abrió su mano y la mosca zumbó enfurecida y se perdió en dirección a la nada. Raúl Núñez, o quienquiera que fuese, reapareció, los dos aprovechamos para demandarle bebercio.
-El alcohol es una de las mejores cosas que hay, además de un servidor- Hank rió su ocurrencia
-¿Hablas conmigo, viejo?- el tipo ya empezaba a cargarme. Pasa siempre con los escritores. Viven en el afectado convencimiento de que el mundo necesita sus soporíferas monsergas. Se equivocan, claro.
-Los hombres más fuertes son los más solitarios- la llevaba peor que yo, al parecer
-¿ Por qué hace tanto calor aquí, viejo? ¿ Y dónde coño están las tías?
-Lee, chico- me señaló un cartel sobre la nevera de los vinos. " Bar Infierno, echa un trago mientras el diablo termina con las chicas", eran unas llamativas letras doradas, salpicadas de pequeños diablillos que correteaban entre ellas.
-Muy gracioso, así que estamos en el infierno, ¿ eh?
-Sí. Y no se pagan las copas
-Coño, voy a quedarme por una temporada- asentí encantado
-Chico, nadie abandona este sitio. Nunca- Hank rompió a reír como si un resorte se hubiese soltado dentro de su cuerpo. Reía y reía, mientras su tripa cervecera se inflaba y desinflaba compulsivamente.
-Buah!!! Me aburres, tío. Voy a echar una meada.
Su escandalosa risa me acompañó por todo el antro hasta el pasillo de los retretes. Me detuve un momento. Un cartel que anunciaba un concierto llamó mi atención. El grupo se llamaba " Me Cago En Tus Muertos". El cantante semejaba el doble de Joey Ramone, la misma pose desgarbada y todo. El guitarra era el gemelo de Joe Strummer, en su época Sandinista. Al bajo, un niñato desaliñado y de aspecto estreñido. Joder, la misma cara que el difunto Sid Vicious tenía el chaval. Tocaban allí, en el Infierno, y el bolo lo organizaba un tal Kike Turmix.
La hostia, daban el pego, ya lo creo.
Localicé la puerta del cagadero. Estaba ocupado. Oí como alguien aspiraba con fuerza. Dos veces, luego moqueó estentóreamente. Al instante, la puerta se abrió. Una reluciente calva me saludó. Un hombre menudo, sonriente, ojos camuflados tras unas gafas oscuras. Su rostro parecía más encendido y empapado que el del resto, si eso era posible. Un pitllo humeaba al final de una ostentosa boquilla que colgaba de su boca.
-Todo tuyo, hermano- me fintó y desapareció pasillo adelante. Que me cuelguen si aquel elemento no era el doble exacto de Hunter S. Thompson ¿ Qué me pasaba? ¿ Había tocado fondo como aseguraban mis escasos amigos? ¿Había entrado en zona peligrosa y los deliriums amenazaban con intensificar su desasosegante presencia? ¿ Por qué todo el mundo me recordaba a algún escritor muerto en aquel bar infame?
¿ Cómo se sobrevive a un domingo por la tarde?
Entonces me vino el flash. Y quedé paralizado
El puto control de alcoholemia de improviso. El fantoche del picolo agitando frenético su siniestra varita luminosa, como un muñeco dislocado y fuera de sí.
La curva excesivamente cerrada.
El volantazo brusco. El salto al vacío...
El...¿ Infierno?.

Ginés Torres García, relato inédito.
.
Hanki, Raúl Núñez, Los Ramones, Hunter S. Thompson, Kike Turmix, Sid Vicious... Todo un desinhibido homenaje al realismo sucio y la frivolidad, de la mano de Ginés Torres García, uno de los responsables de esa magnífica página llamada elgatodehank... Para chuparse los dedos... from hell !!! v.

viernes, 28 de diciembre de 2007

Carta de Bukowski a Sheri Martinelli


(Fragmento de una de las cartas de la amplia correspondencia entre Charles Bukowski y Sheri Martinelli 1960 .1967–) (Enviado por Pablo G. Bao)


[…] Es la hostia de duro vivir como un Santo, los nervios ceden, y también sería difícil participar en la Santidad y enterarse luego –igual que una ostra sacada de su concha- de que andabas errado. Si no pones ninguna ficha sobre la mesa, no se las pueden llevar…

Ginsberg y Corso tienen problemas con la prepotencia. Se pasean por distintos países alzando sus nombres por encima de la cabeza mientras todavía tiene brillo. Han caído en la peor de las trampas y su escritura –su creación– tiene que verse afectada porque han sacado su don del molde y lo están utilizando como cuña para entrar en algo distinto. Cuando voy a las carreras o a la cama con una puta, me mantengo al margen. En realidad no entro. Estoy allí para registrar los sonidos de otro mundo. Hago cosas sin ser cosas. Mi x esposa lo averiguó tras 3 años de ejercer de esposa: “No eres más que un maldito puritano”, era su manera de expresarlo. No estaba dispuesto a ofrecerle mi alma para que se paseara en zapatillas y creyó que yo sería presa fácil, “un primo”, después de leer mis poemas. Soy leve como el aire en parte & luego está el duro acero alemán. Espero que Dios y el diablo me concedan el favor de no andar demasiado errado. Sería difícil imponer por uno mismo ninguna ley determinada… sólo que hay una cosa muy rara… Me veo guiado hacia algún lugar desde atrás y desde arriba. De otra manera hace tiempo ya que me habría lanzado por los rápidos.

La mayoría de los poetas –si así se les puede llamar– se pierden en el fango y el riesgo de su propio trabajo. No conocen el secreto e incluso si les revelaras el secreto no sabría utilizarlo. Cuando Ezra [Pound] dijo “no te preocupes por tus contemporáneos”, dijo lo suyo.

Parte del secreto estriba en tener a alguien detrás y arriba. Parte del secreto estriba en fijar la palabra. La palabra debe fijarse sobre la página de manera que quede clavada con taladro, atornillada, remachada a polvos, para que no se la lleve el viento. El lenguaje debe ser un lenguaje básico que no cambie. […] Lenguaje básico no significa facilidad. El pensamiento tiene que ir filtrándose, y las palabras sin la mente son en buena medida fórmula y la mayoría de los autores acaban en fórmula porque se candan y escriben lo que quieren escribir. Cuando te canses, deja de escribir. Yo lo dejé durante diez años. Me llené lo suficiente en diez años para escribir durante 200, tal vez 2.000. Todo es tan sencillo, y sin embargo no pueden verlo. Pound lo vio y Jeffers lo vio, y el resto de las páginas fueron desperdicio. T. S. Eliot se puso en plan mono y le cogió gusto al bocado y le cortaron la boca. Los dioses nos han dado algo y los dioses se enfurecen, se enfurecen de la hostia cuando se les agravia.

HANKOVER BLOG

Bon Voyage

VEINTICUATRO AÑOS, por Raúl Núñez.


Veinticuatro años.

No tengo nada.

Ya he tendido los ojos para siempre

a este hermano imbécil o santo del poema.

He cortado las sogas al trapecio

y al caer he cantado.

He tenido coágulos de flores en todas las heridas.

He caminado países

he vuelto

hoy me vuelvo a ir.

He mendigado en puertos extranjeros

y en trenes que cruzaban Europa.

He soñado con Blaise Cendrars.

He tocado la guitarra en una calle de París.

He tenido miedo en Estocolmo

bajo la nieve.

He juntado papeles por la calle

para ir a escribir a una plaza

en la madrugada.

He trabajado, he sido bueno.

Agradezco estar vivo y amar.

Amar a los adolescentes.

Amar a Dylan Thomas y Allen Ginsberg.

Amar a los sucios y a los locos.

Amar a los negros.

Amar Woodstock.

Amar todas mis visiones.

Amar a mis amigos.

Amar el mar.

Amar la mágica incertidumbre del camino.

Y sé

que el poema sobrevivirá a todo.


Raúl Núñez, del poemario People ( Tusquets, 1974 ).

BAD LIEUTENANT

Despiadado retrato de la corrupción policial, alucinante descenso a los submundos de la prostitución y las drogas y salvaje crítica a Babilonia, Bad Lieutenant ( Teniente Corrupto ), de Abel Ferrara, es uno de esos films que te revuelven por dentro, te enganchan y estremecen y nunca se olvidan... Un insuperable Harvey Keitel colocándose fuerte de principio a fin, una violación a una monja en su iglesia y una sórdida trama de persecución y búsqueda, de abyección y ascesis, de degradación y redención moral, convierten esta película, llena de epatantes y estremecedoras secuencias, en una pieza de culto dentro de la ya de por sí escabrosa y personalísima filmografía de Abel Ferrara. Dura como el acero, tremenda e imprescindible. v.

jueves, 27 de diciembre de 2007

ALEISTER 666

The number of the beast

¿ POR QUÉ LA GUERRA ? 1 relato de Lluis Pons Mora.


Conozco mujeres que apenas me conocen. Por eso nos llevamos tan bien. Me dicen que soy un buen tipo, que soy simpático, amable, gracioso. Esas cosas. Me tratan con cariño. Siempre intento mantenerme alejado de ellas, porque podría acabar liándome con alguna. No hay más. Una vez me pasó. Así de simple.
Deberías de hablar con todas las mujeres de este planeta, para decirles todo eso que los dos pensamos, no sé bien en qué proporción. Eso de que soy egoísta, frío y espantoso. Que soy un insensible, un sarcástico y que con el tiempo pierdo todas las atenciones posibles. Que soy incapaz de esforzarme por algo, que al levantarme tengo cara de mala ostia y me meo en cualquier lado. Que a veces paso días frente a esta pantalla sin importarme apenas la parte del mundo que no es esta pantalla. Que no muestro interés por nada, ni nadie. Ni familia, ni visitas, ni eso que llaman compromisos de pareja o algo así. Y no olvidar que me matan los domingos porque me recuerdan al puto cristianismo, y porque no pasa el cartero, y que puedo ser muy mal hablado a cualquier hora, y muy intolerable, cagándome en todo sin ofrecer una idea a cambio, u ofreciendo sólo destrucción. Ni olvidar mi mal humor, y que ronco como un tractor en marcha subiendo una colina.
Seguro que a mí se me escapa algo. A ti se te da tan bien, niña, hablar así de mí casi a diario. Deberías haber sido escritora, tendrías gancho, hubieras sido una jodida escritora más que aceptable. O quizás no, no me refiero a ti, me refiero a que realmente ningún escritor debería haber sido escritor. En mi caso no me queda otra alternativa. Es algo así como tú y el arte, o como tu feminidad. Naciste para ello y con ello, y sabes aprovecharlo porque te encargas de instruirte para que tus armas sean más completas. Yo no me instruyo, o utilizo otros métodos, pero tú esculpes, y tallas, y visionas, y dibujas, y moldeas la tierra con agua como si fuera hachís con tabaco, inequívocamente bien. Tus manos son tu edén y te pertenecen. No fallan, aunque a veces actúan con miedo o desdén, como cuando cocinas o acaricias mi sexo. No renuncies nunca a tus manos y tu sangre. Sabes a que me refiero: en tu sangre hay artesanía y en la mía tinta agria. La sangre es a veces nuestro único punto en común. No exactamente la sangre, sino que ambos tenemos algo en ella, cada uno una cosa diferente, pero lo tenemos. Hay mucha gente que sólo tiene sangre en las venas, y la mayoría son unos acabados aunque tengan grandes empleos y oportunidades. Aunque también es verdad que incluso para tu propia sangre y su poder eres más aplicada, eso tampoco deberías olvidarlo en tus declaraciones. Eres como una arquera subida a una atalaya, disparando, concentrada, creando poco a poco, certera y correctamente. En un orden. Yo soy una perra de monte que menstrua renglones y mis periodos no avisan ni se atienen a las lunas. Meto cuello en los combates y lo mismo de un bocado mato a uno que lo mismo me quitan de en medio con sólo un bocado. Lo importante es que me siento bien siendo una perra de monte, porque me mantiene y me hace sentir vivo.
No debería hablar de estas cosas. No es verdad que se pueda hablar de todo. Como anoche cuando me dijiste que te importaba un carajo la camarera de aquel chiringuito, o como cuando estaba jodido por lo de Demelza y lloraba día tras día. Esas cosas que deben tragarse y guardarse para uno mismo. Esas cosas que según el mundo no pueden suceder, ni pensarse, ni decirse, ni desearse; como en el puto cristianismo.
Todo es tan relativo, incluido el todo. La escritura es la salida pero la salida es interminable, no me lleva ni nos lleva a nada, nunca. Pero alivia, es el acto más egoísta y más placentero y trascendental, aunque dura muy poco. Más egoísta que amar, créeme, estoy casi seguro, como casi seguro estoy de que los jueves apenas me amas, o quizás los lunes, o los martes. Ojalá sólo fuésemos amantes, lo pienso a menudo. No quiero decir que sólo debiéramos follar, ya me entiendes, o no sé si me entiendes. Quiero decir que ojalá fuéramos-volviéramos-empezáramos-pasáramos a ser amantes. Sólo eso.
Por mucho que escribiera, bien o mal, nada podría explicarse. Lo inexplicable es lo que abunda. Ahora mismo, silencio un cigarrillo contra el cenicero, el perro me lame un pie, el gato corretea por los muebles, y allá a lo lejos, al otro lado de la habitación, pasan fotos tuyas desnuda a modo de salvapantallas; sin explicación. Nada la tiene, y se acaba otro día sin un poema.
Y si la tuviera no me serviría.

Lluis Pons Mora, relato inédito. Ilustración de Robert Crumb.

Toda una delicatessen de nuestro drugo Lluis Pons Mora que, estoy seguro, os sentará mejor que los langostinos y el turrón en estas fechas frívolas... Que lo disfrutéis !!! v.

HOMENAJE A BUKOWSKI & BAMBINO en Sevilla.

Si ayer mismo os informábamos de la primera presentación extraoficial de Resaca/Hankover en León el próximo día 29 ( CCAN ) homenajeando a nuestro padrino Buk, hoy 27 hacemos lo propio respecto a otro homenaje semejante en Sevilla, a cargo de los hermanos del Cangrejo Pistolero Ediciones... Aunque en esta ocasión, y para rizar aún más el rizo, el homenaje no será sólamente a Hank, sino también a nuestro gigantesco y admiradísimo Bambino, con cuyas rumbitas desgarradoras y viscerales muchos hijos de Satanás aprendimos a caminar... Esa maldita pared, que separa tu vida y la mía... Estamos, pues, de fiesta y enhorabuena aquí y allá, en León y en Sevilla, y nos llevamos a Bukowski en volandas por toda la piel de toro... En L, ya me encargo yo, además de a nuestros psicotrónicos Stones, Ramones, Fuzztones y demás fabulous & furry rockers, pincharemos algún temita del Bambi y brindaremos a la salud de todos vosotros con los versos de Hank bajo el brazo... Salud & purísima vidorra, hermanitos. v.

miércoles, 26 de diciembre de 2007

Mohamed Chukri, el más grande escritor de Marruecos




Pablo G. Bao, nos envía esta necrológica, firmada por Javier Valenzuela y aparecida en El País en 2003 tras la muerte de Mohamed Chukri, en efecto el mas grande escritor de Marruecos, y cuyas obras llegan a nuestras orillas en patera, casi clandestinamente. De hecho, algunos lectores han tenido el placer, la emoción de descubrirlo a través de este blog. En breve, incluiremos algún fragmento de su obra principal, El pan desnudo.

Mohamed Chukri, el más grande escritor de Marruecos

Mohamed Chukri fue un gran escritor y una persona maravillosa. Este marroquí, que hasta pasados los 20 años de edad fue analfabeto y cuya infancia y juventud transcurrieron en una miseria y una violencia tremendas, fue un autor de la estirpe de los malditos, con una obra corta, intensa, repleta de amor a la humanidad y odio a las injusticias. Como persona, Chukri fue un gran amigo de sus amigos, con su rico corazón y su modesta casa siempre abiertos a aquel que no fuera un gilipollas. Sus amigos llevaban meses esperando la noticia que les llegó ayer por la tarde: la muerte de Chukri, como consecuencia de los múltiples cánceres con que su cuerpo había terminado respondiendo a tanto alcohol y tanta vida golfa, tanto sufrimiento y tanto gozo.

Chukri tenía 63 años. Había nacido en una pobre aldea rifeña, en la época del Protectorado español sobre el norte de Marruecos, y eso explicaba su excelente manejo del castellano, aunque no el cariño que siempre sintió por los españoles y su literatura. Su padre era un desertor del Ejército colonial que ataba al niño Chukri a un árbol y le azotaba con un cinturón de cuero. Ese padre era tan brutal que un día mató al hermano de Chukri: lo estranguló en un arrebato de cólera. Chukri nunca olvidó, ni perdonó, a su padre. Y si nunca quiso tener hijos fue, según explicaba, por el temor a reproducir con ellos lo que su progenitor les había hecho a él y a su hermano.
Analfabeto hasta los 21 años, pero dotado de una inteligencia y una sensibilidad innatas y extraordinarias, Chukri fue un autodidacta. Contó su infancia y juventud en El pan desnudo, uno de los libros más importantes de la literatura árabe contemporánea. Libro duro, muy duro, El pan desnudo es un ejemplo de literatura descarnada y directa, la que practicaría el marroquí hasta el final de sus días. Su última obra traducida al castellano, Rostros, amores y maldiciones, participa de ese mismo espíritu: escenas brutales contadas de un modo tan sencillo, con tal aparente objetividad y desapego, que su eficacia estremecedora sale redoblada. Por ejemplo, en Rostros, un hombre le hace una felación a su anciano padre para que ya no necesite mujeres, para que no se case de nuevo y él no tenga que compartir con nadie su herencia. Y eso está contado escuetamente, sin comentarios ni efectismos de ningún tipo.
La última vez que nos vimos, en Tánger, donde Chukri vivía desde hacía décadas, el escritor me confirmó que la historia del hijo que le hace la felación al padre era verídica, era algo que había ocurrido en una aldea del norte marroquí, era un crudo trozo de realidad como todo lo suyo, desde sus aventuras con prostitutas de los cabarés de Tánger hasta su amistad con muchos de los escritores internacionales que recalaban por esa ciudad: Paul Bowles, Tennessee Williams, William Burroughs, Jean Genet, Allen Ginsberg, Juan Goytisolo, Tahan Ben Jelloun...
En ese encuentro, Chukri me anunció también que no sería un integrista fanático el que le mataría -él estaba en la lista negra del islamismo-, sino el cáncer. Me lo contó con mucha serenidad y hasta con una pizca de humor. Y es que el descubrimiento de que Chukri sufría esa enfermedad había llevado al rey Mohamed VI a cuidar de él, cubriéndole la atención médica en un hospital militar de Rabat y creando una fundación para atesorar y preservar su obra. "Ahora que me estoy muriendo", dijo sin rencor, "se dan cuenta de que soy un escritor marroquí".
Era el más grande de los escritores marroquíes. No deja esposa ni hijos ni fortuna material de ningún tipo, pero sí unos textos impresionantes. Su obra El pan desnudo ha sido traducido a 40 lenguas, incluido el hebreo, y entre la literatura árabe difundida internacionalmente sólo es superado en celebridad por los de Naguib Mahfuz. Pero ese libro estuvo prohibido a los lectores marroquíes hasta hace bien poco, por la sencilla razón de que era demasiado realista. En él Chukri retrató un lugar y un tiempo desde el lado de los que limpiaban botas, vendían cigarrillos de contrabando, trapicheaban con kif, cometían pequeños hurtos o se prostituían con extranjeros. Luego, en Tiempo de errores, segunda entrega de la trilogía autobiográfica iniciada con El pan desnudo y culminada con Rostros, Chukri contó su extraordinario esfuerzo para convertirse en escritor desde su condición inicial de pícaro.
En una entrevista que sostuvimos para Babelia, el suplemento de libros y cultura de EL PAÍS, en el otoño del pasado año, Chukri declaró: "Yo estoy comprometido socialmente. Me inclino a defender a las clases marginadas, olvidadas y aplastadas. No soy Espartaco, pero creo que todas las personas tienen una dignidad que tiene que ser respetada. Aunque no hayan tenido oportunidades en la vida".
Digno, muy digno: así fue Chukri hasta el final. Un gran señor en los márgenes, y por ello más raro y apreciado; un escritor y un amigo irrepetibles.-

HOMENAJE A BUKOWSKI en el C.C.A.N.

luces estroboscópicas en navidad:
un homenaje a Charles Bukowski

LECTURA Y MÚSICA EN DIRECTO:

VICENTE MUÑOZ ÁLVAREZ
JORGE PASCUAL
SILVIA D CHICA
JOHN- FLAMENCO
MARCOS Y RAMÓN- JUNTOS EN ACCIÓN

Sábado 29 de diciembre a las 21 h. en el C.C.A.N. ( León ).Entrada libre.

Sí, queridos drugos, allí estaremos algunos de los cocineros de esta Resaca homenajeando al tío Chinaski, calentando motores para las macrofiestas de presentación de nuestra antología en abril y despidiéndonos, al menos temporalmente, de nuestra queridísima buhardilla libertaria. El CCAN y Charles Bukowski se lo merecen... Os esperamos !!! v.

HIJOS DE SATANÁS

Against Babylon

A SOLAS CON TODO EL MUNDO, por Charles Bukowski.


la carne cubre el hueso

y dentro le ponen

un cerebro y

a veces un alma,

y las mujeres arrojan

jarrones contra las paredes

y los hombres beben

demasiado

y nadie encuentra al

otro

pero siguen

buscando

de cama

en cama.

la carne cubre

el hueso y la

carne busca

algo más que

carne.


no hay ninguna

posibilidad:

estamos todos atrapados

por un destino

singular.

nadie encuentra jamás

al otro.


los tugurios se llenan

los vertederos se llenan

los manicomios se llenan

los hospitales se llenan

las tumbas se llenan


nada más

se llena.

Charles Bukowski, extraído de 20 Poemas ( Grijalbo Mondadori, 1998. Traducción de Cecilia Ceriani & Txaro Santoro ).

Nuestro gran Bukowski en estado puro: sencillo, contundente, revelador, impactante y profundo. Siempre a tu salud, Chinaski. v.

PRIVADA DANZA DE MÚSICA, por José Manuel Sanrodri.

Unos oídos que se han quedado ciegos
se resignan a escuchar el vértigo vacío de la música,
donde los violines de las chicharras descifran el silencio
y el frágil pentagrama interpreta irrespirables notas
para que dance una muñequita con ojos de goma
que pernocta en el interior, de un joyero en madera rota.
Al hervir en el aire la vigilia de una melodía metálica,
los dedos de mis pies se apuntalan en el torpe zapateo
de secas polifonías, no se escucha el vinilo arcaico de burbujas,
y mis piernas, son remplazadas por los resortes de bisagras
de las que cierran y abren en el agua de ese cuerpo mío;
la música rescinde y la polichinela en el último giro se desarma.

José Manuel Sanrodri, inédito.

martes, 25 de diciembre de 2007

HAPPY CHRISTMAS

Only love

LA HORA DE PELEAR, por David González.


no digas que no.

Sí puedes cambiar el mundo.

sólo precisas
un brazo
una mano
piedras.

estas son las mías:

llevo el pelo largo.

me salto los semáforos en verde.

me enfrento en duelos de miradas
siempre que la autoridad competente me desafía.

en el autobús, le cedo el asiento a los niños:
los mayores ya tuvieron su oportunidad
y no supieron, o no quisieron, aprovecharla.

no uso gafas de sol:
no me avergüenzo de mis lágrimas,
y cuando hablo con alguien
le hablo a los ojos.

no miro a nadie por encima del hombro
y eso que mido 1 metro 85 centímetros.

no hablo de lo que no sé.

no hablo.

escribo.

escribo poemas.

estas son mis piedras, parte de ellas.

piensa en las tuyas,
y recuerda:
brazo
mano
piedras.

pero,
sobre todo,

el gesto.

David González, del poemario La carretera roja ( C.E.L.Y.A. 2002 ).
En la foto: Arthur Cravan, poeta y boxeador.

El loco vagabundo y el ángel laten en el Tiempo, desconocidos y no

obstante registrando aquí lo que podría quedar por decir

en el tiempo después de la muerte.

Allen Ginsberg, fragmento de Aullido.

lunes, 24 de diciembre de 2007

CRAZY CHRISTMAS

Beyond the dark

A TRAVÉS DEL ESPEJO, por Alfonso Xen Rabanal.

¿Por qué tú también tienes un muro interno donde te refugias y lames tus heridas, donde te retraes y te aíslas, donde sufres en la dicotomía del ser tú y tu ser social, donde te supuran las heridas que gangrenan tu interior, esas que siempre están pero que vas a intentar olvidar con mil apósitos, los que te ofrece la sociedad, hasta que llegue el día en que la sangre que no fluye sea la sangre que necesites para seguir viviendo?

¿Por qué sientes que no fuiste feliz, te acostumbraste a competir nada más nacer, quemas una etapa tras otra rápidamente, te temes pues algo te dice que te desbordas, te aferras a lo que sabes que te quema, no te llena lo común la mentira el engaño, pero sabes que has de jugar ese juego socialmente correcto, no quieres sufrir pero a veces callas, romperías el espejo, no sabes cómo encauzar todo tu potencial, eso que se escurre entre las grietas de la planificación, esos momentos... en los que intuyes el vacío en ti, en lo que te rodea...?

Alfonso Xen Rabanal ilustrado por Cusco Vinalia, extraído de Crónicas para decorar un vacío: http://www.elbluesdeluzazul.blogspot.com/

El gran Alfonso Vinalia, nuestro incombustible Bufa, está a punto de finiquitar su esperadísima novela en construcción, nacida por, de y para la niebla, esbozada en vivo y en directo en su blog, psicotrónica y metafísica, reveladora, visceral, oscura como la tumba donde yace mi amigo, laberíntica y cavernosa. Extraígo una vez más de su Blues de luz azul este inocente entremés para la beatífica Noche Buena... Salud & Paz on the Road, hermanitos. v.

1 poema de AMERICANA, por Nacho Escuín.


Hay varias cosas difíciles de entender

tan pronto estás arriba como abajo

te quieren o te odian

y pasar desapercibido sólo es posible

para algunos.

Para entenderlo hay que saber qué suelo se pisa

y cuál es el lugar indicado para ello.

Los que vienen detrás

saben que nada es eterno y luchan

por pisar donde yo piso.

Yo os regalo mi baldosa,

tomadla.

Y tened cuidado, es una trampa:

después de ésta querréis otra.

Por desgracia para mantenerse en pie

existen dos opciones:

irse muy lejos

o morder para sostenerse.


Nacho Escuín, del poemario Americana ( Ediciones Leteo, 2007 ).

Este es otro de los poemas que me llegan bien profundo de Americana, el nuevo poemario de Nacho Escuín, recién horneado por Ediciones Leteo. Un libro emotivo e intenso, certero y existencial, que marca un punto de inflexión y madurez en la poética de nuestro hermano eclipsado, y una de las recomendaciones imprescindibles para las largas noches de este gélido invierno en la tierra. v.

LOS SUEÑOS

Toño Benavides & Vicente Muñoz
en El merodeador
( Ed. Baile del sol 2007 )

TRISTEZA PRIVADA, 1 poema de BOB KAUFMAN.


Sentado aquí a solas, en paz

con mi tristeza privada

desnudo de conceptos

del ojo de la mente

la visión del revés, invertida

mirando sólo las propiedades

que hay dentro de las paredes del yo,

sintiendo las raíces que me sujetan

a este simple árbol humano

que zarandeo para liberarme,

sabiendo que el éxito

de este estallido

será medido

por la furia

de la caída

en la paz eterna

el fin de Todo.


Bob Kaufman, extraído de No pasa nada. Los poetas beat y Oriente. Traducción de Jesús Aguado ( El Bardo Poesía, Luces de Gálibo Ediciones, 2007 ).

domingo, 23 de diciembre de 2007

RESACA/HANKOVER

Freak power & acid test

FELIZ FALSEDAD, por J. Kalvellido.

Nada más, ke pasen una buena époka navideña y konsuman para kel país salga de la terrible recesión ekonómika en la kestán metidos todos los empresarios (pobretikos míos!)y gobiernos mundiales.
Amén.
JKAL



CARA REVENTADA DE ÁNGEL, por J.M.Vara.



Fecha de caducidad,
Una cara esculpida a jirones de rabia.
¡Me excitaba tanto que me pegaras!...
Autodestrucción a flor de piel,
Hematomas en el alma,
Allí donde se aferra desesperadamente
El cadáver semidescompuesto
De tu juventud.

Cara reventada,
Sangre a borbotones
Inundando los poros insondables de tu piel
Como estigmas de lo efímero
Y del viejo dolor anclado entre las piernas…

¡allí donde el sexo deviene mediocridad!

Festín bastardo para almas muertas,
Espectadores ciegos del Circo del Amor.

Fecha de caducidad,
Una cara masacrada por la incomprensión
O cara de ángel abortada,
Reventada,
Cara,
Cara,
FACE, FACE, FACE, fade
Fade in black.

José Manuel Vara, inédito. Fotografía: performance de Congelada de Uva.

sábado, 22 de diciembre de 2007

ESFINGE DE GIZEH: nuevo single de David Murders.


Cama elástica, cámara lenta; rizos rubios, sonrisa esbelta; manos de cuarzo, cuello de mármol, saliva fresca, prístina, extensa, el corazón que late más fuerte y aprisa y falanges y labios, impulsos, cabrios, muelles, los rizos, los cuerpos rebotan, a cámara lenta, la cama, los muelles, los rizos, las flores, la elástica cama, la cama de agua, la cámara abierta, azul bajo el cielo, tomamos el sol, flotar en el agua, la piel bajo el sol, ¡quizá! sobre un yate, ¡quizá! sin un yate, ¡quizá! sobre un agua elástica y nubes, ¡quizá! nubes blancas, ¡quizá! nos mecemos, flotamos con ellas, ¡quizá! cama elástica, juego y colchón de mar bajo el cielo y jugamos, jugamos, hacemos el amor, saltamos, flotamos, hacemos el amor, reímos, follamos, ¡quizá! hacemos el amor, nos miramos, nos tocamos, hacemos el amor, saltamos, cama elástica, cámara lenta, cámara del amor, y ¡quizá! nos zambullimos bajo el cielo azul: tú haces un doble salto y yo caigo a lo bomba, desde muy alto, así ha sido nuestro salto. ¡Esplásf!… La espuma llega hasta la playa y desaparece allí, ¡quizá!; quizá qué…, quizá qué…
Mi esfinge. Mi esfinge.
Quizá qué.
Mi sílfide.
Sirena.
Hada.
Muñeca.
Nena.
Sol.
Sol en el desierto abrasador donde padezco la pesada exposición a tu inclemente ausencia. Es este un destierro abrupto convertido en eterno errar. Oh ausencia llena de inclemencia.
Sol de tu ausencia, muñeca, en que mis ojos ardieron –oh nena– mientras vagaba buscando Gizeh, buscándote a ti –corriendo, muñeca-, siempre solo.
Prefiero morir ¡a ser arrojado! muy lejos de ti para siempre jamás.
Nada hay peor ¡que ser recluido!, apartado de ti, en otro lugar.

Báculo en mano, ya alzo los brazos, las tetas, el rostro y los ojos quemados y grito ante el cielo de este destierro:

"¡Al fin, por fin te he encontrado, nena!"
"¡Al fin, muñeca, he llegado al final!"
"¡El fin, mi esfinge! ¡Una noche sin fin bajo el Sol, el Signo, el Sino de tu inclemente ausencia!"

Entonces, Dios, que te ha desposado, envía un rayo que me electrocuta y me mata.

Bailo sobre las puntas de los pies durante un rato. Mi voz se apaga y caigo al suelo.
Mi cuerpo es alimento de las fieras.
Mis restos se los lleva el viento.

Y tú vives por siempre;
para siempre yaces con Dios.

Yace con Dios, amor mío

por los siglos
de los siglos


en el Sol.


David Murders & the representatives of Evil, nuevo single. Portada de Víctor Mardaras.

1 POEMA de ANA PÉREZ CAÑAMARES



Verano en una ciudad blanca.
El olor del jazmín y del sexo
inundan la habitación en penumbra.

Desde el cajón el reloj
dicta sentencia como un juez
en un país sin policía.

Durante una semana marcharé
al ritmo que marca mi cuerpo.
Mi cuerpo: paraíso fiscal
sólo para tus riquezas.

Ana Pérez Cañamares, inédito.

viernes, 21 de diciembre de 2007

THE BRIDES OF FUMANCHU

De vez en cuando, queridos drugos, nada mejor para descongestionarse de la ridícula tontería humana que uno de nuestros films de culto friki, joyitas polvorientas perdidas en los rincones más oscuros y refrigerados de nuestra cripta bodega. Se nos echan encima las navidades, con toda su parafernalia y mascarada, así que cargad vuestras despensas de alkaselzer y, ante la primera gran resaca, videad esta satánica, psicotrónica y ultrabizarra película del malvado Fumanchú ( gigantesco Christopher Lee ), que os dejará suavecitos como sedas... Crazy christmas & que Hanki os guarde de los bichos malos. v.

CRAZY CHRISTMAS

Sweet hankover

Homo Brutus


jueves, 20 de diciembre de 2007

El pan desnudo /Il pane nudo (la pelicula)



A propósito de nuevo del gran Mohamed Chukri y de la desazonadora imposibilidad de encontrar sus libros en este maldito país (los que se han editado están descatalogados, como bien dice Pablo G. Bao en la anterior entrada referida al escritor bereber, y los demás –obras de teatro como “La felicidad”, novelas cortas como “Zoco Chico”, o libros de relatos como “La tienda” o “El loco de las rosas”, no han sido traducidas) existe una versión cinematográfica italiana de “El pan desnudo”: Il pane nudo" (el director es el argelino Rachid Benhadj), y su trailer puede verse en

www.forbreadalone.com

No fue precisamente Bernardette



Obra de teatro mexicana que se inspira en Chinaski. Más información: aquí.

The Joshua Tree


De Fanzinedigital, sobre la edición conmemorativa de The Joshua Tree:
En un libro que acompaña a la edición conmemorativa del disco, Bono explica que, en principio, el trabajo se iba a llamar “Las dos Américas”. El título tenía su origen en las dos caras, con sonidos diferentes, del LP, tal y como sucede en el norte y el sur de aquel continente. El cuarteto inició un recorrido por Estados Unidos, del cual decían que “no es sólo un país, sino una idea”. Bono invoca a los escritores Tennessee Williams, James Baldwin, Allen Ginsberg, Charles Bukowski y Sam Shepard como inspiradores de su viaje.

Matt Dillon



De Matt Dillon, uno de los grandes actores de su generación, que interpretó a Bukowski y de quien aprovechamos para recomendar la magnífica Rumble Fish (La ley de la calle), a la que pertenecen el cartel y la fotografía de arriba, recogemos estas declaraciones:

El actor añadió que "conseguir ciertos papeles es difícil" porque se le sigue considerando "un chico problemático", aunque ese encasillamiento le viene bien para que le ofrezcan ciertos papeles, como el personaje de Charles Bukowski en "Factótum" (2005).


"Trabajando con un muy interesante y serio realizador (Bent Hamer) interpreté a Bukowski, algo que nunca había imaginado que podía hacer", explicó.


El actor de comedias románticas como "Solteros" (1992), de Cameron Crowe; "Beautiful girls", de Ted Demme (1996), y "Un marido para mi mujer" (1994), de Anthony Minghella, bromeó sonriendo que "he dejado de leer libros", aunque confesó ser lector de "Charles Bukowski, Jack Kerouac, porque escriben saltándose las normas".


"Pero no leo mucho, soy un actor, por lo que mi cultura es incompleta", señaló irónicamente.

22. KIKE TURRON


  • Kike Turrón (Madrid, 1970)
  • Es autor de los libros de relatos Nadie come del aire (1998), B.N.C.A. (Buitre no come alpiste) (2001) y Al domador se lo tragaron las fieras (2006), del libro De espaldas al kiosko. La historia de los fanzines en el estado (1996) y de las biografías Historias escritas (Biografía de Boikot) (2000), Dentro (Biografía de Los Enemigos) (2001), La paja en el ojo ajeno (Biografía de A Palo Seko) (2001), Tremendo delirio (Biografía de Siniestro Total) (2002), La sana intención (Biografía de Rosendo) (2003), Jimmy Jazz, décimo aniversario (Biografía del bar vallecano Jimmy Jazz) (2004), El Hebe, 1980-2005, la barra del barrio (Biografía del bar vallecano) (2005) y El sol y la rabia (Biografía de Reincidentes) (2006)

miércoles, 19 de diciembre de 2007

Raices, Mohamed Chukri




La literatura de Mohamed Chukri es imprescindible para todo buen hijo de Satanás, se traga como la propia saliva cuando no se tiene otra cosa con la que llenar el estómago, revienta en las tripas con un sabor a tierra dura y seca, a un sol que destila zumo de naranja licuado con sangre, y hace rugir dentro una fiera, dispuesta a sobrevivir, a pelear, a no rendirse jamás, a mantener siempre la dignidad… Aquí va un texto, extraido de www.pliegosdeopinion.net, en el que Chukri nos habla de su gran novela, El pan desnudo, entre otras muchas cosas.

Raíces (Mohamed Chukri)

Aquellos que han leído mi autobiografía, El pan desnudo , saben que soy hijo de la inmigración.

Fue en los años cuarenta. Mi territorio de origen, el Rif, padeció una terrible sequía. Los míos, como todos los demás, fueron arrojados a los caminos por el hambre y la escasez. Tomaron los caminos del exilio unos hacia Orán, otros hacia la zona norte de Marruecos y especialmente a Tánger. Desde Beni Chiker, aldea próxima a la ciudad de Melilla, transportamos un solo y único bien: el rifeño, nuestra lengua.

Tenía siete años cuando encallé en Tánger, el Paraíso de la época. Y, cuando quería jugar con otros niños del arrabal donde mis padres habían plantado su barraca, encontré la persecución: - “Vete de aquí, hijo del hambre”. “¡Largo! ¡Fuera, rifeño!”

¿Será natural la crueldad en los niños? En cualquier caso, sabe ser espectacular.

En este mismo arrabal vivían gitanos y andaluces, tan marginados como nosotros, los rifeños, pero gozando de un estatus menos precario que el nuestro. Hacía mucho tiempo que estaban instalados allí. Ganaban su vida algunas veces haciendo trabajos manuales, otras veces robando. Sus hijos me aceptaron y trataron como uno de ellos. Unía con frecuencia mi fuerza a la suya para atacar a los otros niños del suburbio, los más violentos, los marroquíes. Estos niños gitanos y andaluces me enseñaron no solamente a defenderme, los niños hablan sobre todo con el lenguaje del cuerpo, sino también a pronunciar las primeras palabras en español. Es así como aprendí el español antes que el dialectal marroquí. La lengua del exilio.

Todavía hoy, el Mediterráneo es un espacio de exilio, de inmigración. El hambre no es tan violenta como en el pasado, pero ha dejado paso a sus secuelas: el marasmo económico, la elevada tasa de paro, los accidentes ecológicos, la guerra étnica, todos vectores del mismo efecto inhumano, todos fuente de desestabilización.

Estos factores están en el origen del desplazamiento masivo y con frecuencia incontrolado de hombres en una geografía perturbada por la Historia –antigua y moderna-, por las ideologías y los sistemas económicos. Así, se vuelve difícil hablar actualmente del porvenir del Mediterráneo sin vernos enfrentados a esta siniestra realidad.

El escenario actual es sombrío, casi apocalíptico, como ya constaté en 1993 en otra comunicación. Todavía hoy, me veo obligado, moral y humanamente, a denunciar:

• El fenómeno de los espaldas mojadas .

• El fenómeno de las barcas de la muerte ( pateras )

La emigración ha cambiado de cara: se ha convertido en silenciosa y mortífera. Si la emigración fue, en el pasado, una prueba iniciática que acrecentaba el humanismo de la persona y le permitía pasar de un estado de indigencia a un estado de enriquecimiento, se ha convertido, actualmente, en una antecámara de la muerte, real o metafórica. La candidatura a la emigración es una candidatura a la muerte. Expulsado por las carencias y la sequía, arrojado en brazos de la aventura, el emigrante no lleva con él más que un rayo de esperanza y un asustado soplo de dignidad. Conozco los asuntos de la vida errante. Yo también he sido perseguido por niños y viejos, pero me fue dado aprender la lengua de mis perseguidores. Es verdad que intentaba entonces disimular mi acento para ocultar mi origen indeseable en una sociedad que despreciaba a los rifeños. Pero terminé por triunfar sobre esta lengua estructurada y poderosa, clara y extranjera. La sometí a mi ley. La vencí.

¿De qué triunfo se jacta el actual emigrante? ¿Sobre quién?

Asistimos actualmente a una pérdida de valores morales que provoca por todas partes un estallido de las sociedades que las han producido. La costa sur ha aceptado también la filosofía de “el tiempo es oro”. Intenta, también ella y por todos los medios, hacer suyas las ideas utilitaristas y la lógica cartesiana. Favorece a los grupos económicamente fuertes. Aparca a sus marginados en las zonas periféricas. Todo eso tiene como consecuencia que los jóvenes, hombres y mujeres, sueñen con otra tierra, con otra vida. Ocurre que son justamente los menos tocados por el virus del fracaso. Ocurre que, justo frente a ellos, en la punta de sus miradas, espejea una tierra más clemente, o así lo creen ellos, la de la ribera norte. La desean. La codician. La acarician. Desean, cueste lo que cueste, fundirse con ella.

Adelante, hacia la aniquilación.

El litoral español se alcanza desde Tánger en menos de una hora.

El transportista hace pagar caro este sueño a aquel que quiere ir a su encuentro. Millares de dirhams. Una suma con frecuencia difícilmente adquirida. Estos Ulises modernos no vuelven siempre de sus aventuras. Los dioses del Olimpo también han emigrado.

El abismo que separa los países ricos de los países pobres es más profundo que nunca. La sociedad de consumo, la opulencia de Occidente, el mito de la democracia, han operado una fascinación inigualable sobre los pobres del tercer mundo. En los países ex-comunistas, millares de personas tenían sus maletas ya hechas, aguardando una aparente esperanza, para venir a la Europa rica. En mi país, centenares de clandestinos intentan cada día atravesar el Estrecho, arriesgando sus vidas sobre pequeñas barcas. Obstinados en su búsqueda de la tierra prometida, provocan a la muerte. Italia conoce este problema. Europa actualmente asiste a este fenómeno con angustia. Ve su ciudadela asediada por todas partes y, para protegerse, intenta (quiere) transformar sus fronteras en una fortaleza inexpugnable.

La muralla de hierro se transforma en una muralla de arena. ¿Qué quiere la Europa opulenta si no salvaguardar su riqueza?

En el Mediterráneo la situación es esquizofrénica. Los países, divididos geográfica y psicológicamente por un modelo nórdico y materialista, buscan soluciones tecnológicas a problemas culturales y sociales, y con la intuición de que las soluciones no podrán ser más que intelectuales; adoptan estrategias inadecuadas. Pues la respuesta a todas nuestras cuestiones puede encontrarse en el pensamiento mediterráneo y orientalista de nuestros humanistas. La hazaña de Ulises puede servir de modelo. Este héroe que surca los mares, errando durante diez años en busca de la verdad, era un emigrante que Ítaca ve volver tranquilizado por la sabiduría y profundamente humanista gracias a su periplo.

Yo fui Ulises, en un momento de mi vida. ¿He dejado de serlo?

He recorrido un periplo como el suyo. Lo recorro aún. Mi espacio de aventura es un espacio escriptural. Mi madre es la escritura. Mis pruebas son de orden intelectual.

Recuerdo que mi madre me obligaba a hablar en rifeño y me prohibía hablar otra lengua que no fuese aquélla. Nacido en el Rif, yo debía continuar hablando la lengua de mi tierra, decía. La muerte libró a mi hermano Abdelkader de esta guerra. A mis otros hermanos y hermanas, hijos e hijas del exilio, no les concernía esta batalla. Eran libres de utilizar la lengua de sus ancestros o la de su tierra natal.

Como ustedes saben sin duda, no supe leer y escribir hasta los veinte años. Aprender una lengua que no era la mía y poseerla fue una prueba, un desafío antes de ser una profesión. Aprendí el árabe clásico con los límites que se imponen a un autodidacta. Sin embargo, alcancé a enseñarlo en las escuelas primarias y secundarias. He podido escribir libros gracias a esta lengua. Solamente, a pesar de mis esfuerzos, a pesar de toda mi voluntad de expresarme en esta nueva lengua, una nostalgia silenciosa y no obstante viva me ata a la orilla de mi lengua materna y sólo se aplaca con su utilización. No soy más que un niño adoptivo en todas las lenguas que utilizo para hablar o para escribir, incluso la lengua del Profeta: no puede colmar el vacío que me ocasiona la ausencia de mi primera lengua, aquélla de la que fui desposeído.

En el exilio, cuando todas las lenguas valen, he hecho de la lengua árabe un instrumento para comunicarme con la sociedad en la que vivo. No me arrepiento de haber aprendido el árabe y de haber escrito en árabe todos mis libros. Diré más, me siento privilegiado frente a mis compatriotas que utilizan otras lenguas distintas a la de su sociedad de origen y que son tratados de ingratos y renegados a pesar de su genio.

No me digan que este juicio es anacrónico... La sociedad árabe posee un pensamiento atrofiado, y tenemos el ejemplo de este poeta bereber que escribe sus poemas en un francés sublime y que sin embargo ha soñado siempre con poder hacerlo en árabe. Reconocía que esta lengua era superior. Era el único que la recordaba tal como la había aprendido en la escuela coránica. Mohamed Kheireddine murió sin poder poseer esta lengua árabe, pura y grandiosa.

Entonces, ¿qué es la escritura? ¿Qué es la expresión?

Imaginad una lengua en hibernación. Imaginad un hombre que intenta usar esta lengua para expresarse. Tal es mi situación cara a esta lengua que me es extranjera.

Dicen que el que encuentra refugio en una lengua que no es la suya está mejor armado para dominarla. La perfecciona mejor que sus nativos. Este es el caso de Conrad, Beckett, Nadokov, Ionesco, Gibran Khalil Gibran...

¿Por qué? La única cosa que puedo afirmar es que la escritura tiene sus secretos, sus misterios que no penetramos impunemente: nos poseen y nos sentimos poseídos por ellos.

Actualmente, mi lengua es la que me permite escribir y el rifeño ha terminado por ser una nostalgia, la de un sueño.

Para el niño de la emigración, para el amante de la escritura, para el autodidacta que no ha cesado de sumergirse en la nostalgia de un sueño, el Mediterráneo es un mar, un periplo, un sueño iniciático, el espacio del Humanismo, el crisol de civilizaciones. Pero ninguna civilización es producto del azar. Es un largo proceso de humanización. No importa qué tribu puede poseer una cultura pero, ¿podemos hablar también de civilización? Los pueblos del Mediterráneo han vivido siempre en ciudades: Alejandría, Cartago, Atenas, Roma, Cádiz (Gades), Tánger... Ellos han forjado una civilización y es por ello por lo que estoy convencido de la fuerza de la percepción, de la capacidad intelectual que nosotros, mediterráneos, tenemos para hacer frente al peligro que amenaza nuestras riberas, nuestras culturas y nuestros hombres, si persistimos en querer seguir ciegamente el modelo nórdico.

El modelo nórdico, utilitarista y racionalista, es útil cuando se trata de organizar el trabajo o de optimizar el rendimiento; pero corresponde al Humanismo de las viejas culturas mediterráneas colmar ese modelo nórdico, insuflarle valores humanos.

Se me alcanza que, para sobrepasar el actual peligro, no hay que culpar ni a las religiones ni a las razas; después de todo, es el hombre quien interpreta los libros y es de sus actos de los que brota la ambigüedad. Es necesario volver a los fundamentos de las culturas, al humanismo que tuvo nacimiento en el Mediterráneo. Es el único modo de humanizar las sociedades de consumo.

Acaso algunas veces con poco se puede llegar a encontrar bastante...

El eslabon encontrado. Rodrigo Fresan.



“Tal vez, pienso, Bukowski sea el eslabón perdido entre Henry Miller y Raymond Carver. Lo pienso ahora, claro. Porque leí a Bukowski antes que a Carver (en las ediciones de Anagrama que llegaban casi a escondidas a la Buenos Aires del Proceso; en la primera fase tan colorida y tan under de la colección Contraseñas con traducciones rebosantes de “coños” y de “pollas”); porque no he vuelto a leerlo desde entonces; y porque, probablemente, ya nunca más vuelva a leerlo.
Tuve la suerte de encontrar a Bukowski en el momento exacto y a la edad justa: cuando la vocación literaria, el sexo, la noche y la alegría de ser un outsider de todo eran una sola cosa. Por lo tanto, Bukowski cumplió su justo cometido: hacer que me olvidara para siempre de Herman Hesse. No recuerdo quién me extirpó a Bukowski de mi organismo. Probablemente fueran Jack Kerouac y Bob Dylan actuando en tándem. O Thomas Pynchon y Kurt Vonnegut. Sí me acuerdo que lo primero que leí de Bukowski (con este tipo de autores iniciáticos el primer libro que se lee de ellos, sea cual fuere, siempre es el único que en realidad cuenta) fue Factótum. Y me sigue pareciendo el mejor aunque hoy se me confunda con todos sus otros libros. No sé por qué, pero podría jurar que a Bukowski le pasaba lo mismo.”

(Texto publicado por Rodrigo Fresán en Pagina/12 (Argentina)