miércoles, 21 de octubre de 2015

PELÍCULAS PARA LA PENUMBRA: Prólogo.




El cine ya no es lo que era. Como todas las grandes religiones, la cinematográfica ha crecido demasiado, se ha desbordado. Hollywood se ha transformado en una iglesia tiránica y casi todopoderosa, en la que nadie cree pero que a todos obliga a confesarse como miembros de la misma. Cada viernes, los cines de las grandes ciudades estrenan película tras película, esperando atraer a las masas de feligreses que, sin embargo, se resisten. Corrompida hasta en su alma de celuloide, la iglesia hollywoodiense solo piensa, como los Borgia, en el poder y el dinero. Para mantener su boato y oropeles no le importa, por supuesto, envenenarnos sin escrúpulos con sus superproducciones miserablemente ostentosas, embaucarnos con sus caramelos envenenados. En público, las masas siguen reconociendo a Hollywood como su única religión, afirman practicarla e incluso, en los peores casos, siguen haciéndolo realmente, de forma automática, por el qué dirán, como las aburridas familias que acuden a la iglesia del pueblo todos los domingos, para cabecear en los incómodos bancos de madera, papar moscas con la mirada perdida, murmurar fragmentos de oraciones casi olvidadas pero, eso sí, saludar a todos los vecinos a la salida de misa. 

Por eso, no es extraño que ante la decadencia, la pompa sin circunstancia y los fastos vacíos por completo de sentido o sensibilidad de Hollywood, proliferen las sectas y las heterodoxias. Frente a la iglesia hollywoodiense, apática y vanidosa, indiferente y presuntuosa, se yerguen cada vez más a menudo grupos disidentes de herejes e incrédulos, que se burlan con saña del credo dominante. Se acabó el papado de Hollywood, su poder absoluto está definitivamente en crisis. Es el momento de otro cine. El momento del cine de culto, como bien sabe Vicente Muñoz Álvarez, que se confirma, con este su segundo libro dedicado a la doctrina gnóstica y neopagana de las “Cult Movies”, como uno de los sacerdotes iniciados en los verdaderos misterios de la religión cinematográfica. La esotérica, hermética y secreta. La que rinde culto a títulos oscuros, olvidados o menospreciados. La que habla el lenguaje perdido de otras eras, mudo y descolorido a veces, a menudo vilipendiado por la ortodoxia y ridiculizado por la ignorancia, pero poderoso siempre en su arcana esencia inmortal, que nos sobrevivirá a todos.

Como verdadero iniciado, Vicente se expresa con sencillez y soltura. Con lenguaje directo y coloquial, sin pretensiones ni pedantería. No espere el lector los latinajos del aburrido ritual del crítico de siempre, que ha perdido todo contacto con la auténtica naturaleza mágica del cine. Lo que importa aquí es cómo se nos descubren, se nos desvelan, título tras título, otras formas y maneras de hacer, ver y entender el cinematógrafo. Viajando por el espacio y el tiempo, abarcando épocas y eras, países e idiomas, con esta su segunda biblia del cine de culto disfrutamos en la intimidad del descubrimiento de títulos oscuros, tanto o menos como del redescubrimiento de otros que creíamos conocer, iluminados ahora por la mirada pura de este nuevo derviche cinéfago, que hace girar ante nosotros miríadas de imágenes olvidadas, títulos recónditos y películas malditas. No hay barreras, tópicos ni hipócritas principios: de la exploitation al Arte y Ensayo, del mudo al technicolor, del Hollywood mágico de otrora a la coproducción europea, del trash al indi, del cine de autor a la Serie B, Vicente Muñoz Álvarez solo se pone como límite no despreciar nada, no negarse nada, acercándose así por ende a la verdadera naturaleza seductora y diabólica del cinematográfico, capaz de hipnotizar al espectador más allá y más acá de sus supuestas virtudes artísticas, narrativas, intelectuales o comerciales.

Eso es lo que, en definitiva, quiere decir para algunos de nosotros “cine de culto”: rendir culto a las fuerzas mágicas, oníricas y oscuras que reinan y desbordan la pantalla, conectando con nuestro inconsciente y con el dominio infernal y divino del imaginario colectivo. Para airear nuestros vicios privados y ocultar nuestras públicas virtudes. El cine en el cine… ¿para qué? ¿Para quién? No, amigos, no. El cine en los altares privados de nuestras casas, en los sótanos oscuros donde se reúnen los iniciados, en las cámaras secretas de nuestros cerebros sobreexcitados. El cine en la vida y la vida en el cine, para encontrar si no la inmortalidad sí la esperanza de trascendernos por un instante, convertirnos en otros, abandonar nuestra envoltura carnal durante un minuto, transformados por el poder visionario de la imagen. Pero siempre, con el dominio justo y necesario de los conjuros apropiados, que nos permitan poner a las potestades cinematográficas a nuestros pies y no a la inversa. Ayudándonos con hechizos como los que contienen, forman y conforman las páginas de este libro. Siempre como señores de la Alta Magia, con los fantasmas evocados e invocados por el cine a nuestro servicio, y no a la inversa, como fantasmas de carne muerta convertidos en ciego rebaño al servicio del papado negro de Hollywood. Ave Kinema! Ave Satani!


Jesús Palacios, prólogo de Cult Movies: Películas para la Penumbra (Exodra, 2015).




HISTORIA UNIVERSAL DE LOS HOMBRES GATO

lunes, 12 de octubre de 2015

MADRID-COCHABAMBA



Tras su exitosa edición en Bolivia, se publica en España Madrid-Cochabamba (cartografía del desastre), escrita conjuntamente por Pablo Cerezal y Claudio Ferrufino-Coqueugniot, y prologada por el gran escritor navarro Miguel Sánchez-Ostiz. Crudo y absorbente volumen de crónicas emocionales y autobiográficas, alrededor de temas comunes a toda urbe. Madrid. Cochabamba. Dos ciudades que pueden ser tantas como lectores decidan entregarse a estas páginas de orfebrería literaria y sentimental. Lírica oscura, humor agrio, excesos, melancolía y furia. Una obra hermosa en su dureza, sórdida y luminosa, a ratos triste, a ratos placentera. Madrid-Cochabamba es un viaje literario por la cartografía del desastre.


HIJOS DE SATANÁS

Larga vida a la Nueva Carne

EN LA TIERRA DE NOD por Pedro Juan Gomilla Martorell.



En la tierra de Nod es el segundo libro de la trilogía Eidolon que se completará con Hogueras de la carne. Si en Arcadia desolada, primera entrega de la misma, la conmoción producida por el descubrimiento de la homosexualidad y, en particular, de la homofobia, comulgaba con los sintagmas largos, próximos a la solemnidad del metro versicular; con los acusados cambios de ritmo y sus crescendos torrenciales; con el zigzagueo delirante de la polimetría; con la intensidad que desbordaba el cauce de los versos; con el tono casi ritualístico que desembocaba en una auténtica y desesperada apoteosis lírica, ahora, sin embargo, el verso se contiene ante la lucha sostenida entre contrarios, entre el yo y el Otro, el instinto y su negación, la resistencia al deseo y la entrega, la muerte y la resurrección, el hijo y la madre, la naturaleza y la moral, tensando el verso en un contrapunto imposible, siempre al límite, al borde de estallar; en una suerte de guerra fría del resorte poético, como si en esa contención se cifrara la única esperanza de evitar el trágico abismo de una verdad evitada, la verdad de la negación.

Del prologo del libro, por Fernando Parra.

*

Mi corazón humano tan inmundo,
que despierta sólo de su duermevela
cuando grita del dolor que él mismo siente,
cautivo como en celda entre costillas,
que son huesos que son rejas que son urnas,
donde vuelan un millar de mariposas,
todas ciegas, de alas negras, nocherniegas,
quisiera arrancarlo de mi propio pecho
cada vez que su mirada cede, cautelosa,
bajo el fuego incandescente de los odios,
cada vez que se entumecen, rosa frágil,
los discursos atrevidos en su boca
con la nieve de esta sorda indiferencia.

Pedro Juan Gomilla Martorell, de En la Tierra de Nod (La Lucerna, 2015).



Pedro Juan Gomila Martorell (1967 Palma de Mallorca). Autor de De las Paganas masturbaciones y la dos primeras partes de la tetralogía Eidolon: Arcadia desolada y En la tierra de Nod, su tercer libro publicado. Poemas suyos han sido recogidos en la antología de La Galla ciencia (Nº 2) y en la revista Ritmo (nº 25): Voces de España, editada por la Universidad Nacional de México.

viernes, 9 de octubre de 2015

SIN INTOXICARLA por Julia Roig.




pregúntale al diablo
si te queda algo
por empeñar

y si es así
dame una noche
una sola noche

sin intoxicarla

quebrémonos
salvémonos

y mi ropa yacerá
como un animal somnoliento
a los pies de tu cama

sabes que eres como el viento
golpeando en la ventana
de mi deseo

sabes que eres el dios salvaje
que reina
en mi alma

sé de tus amaneceres
sé de tus oscuridades

comparto ese lenguaje
del silencio
que pocos entienden

arranco la maleza
de tus senderos ocultos
y puedo darte luz,
aire y 21 grados

saca lo mejor de ti
saca lo peor de ti

y si pretendo escapar
muérdeme los tobillos

tú puedes


Julia Roig, del blog Miss Desastres Naturales.


jueves, 8 de octubre de 2015

HIJOS DE SATANÁS

CRISÁLIDA DE LUNA: Felipe J.Piñeiro.




Nuevo libro de Felipe J. Piñeiro disponible próximamente: "Crisálida de Luna" con la editorial madrileña Pi Ediciones, que será presentado el viernes 30 de octubre´15 a las 20:00 horas en la sala Café Ristán del Hotel Quindós de León.

En 'Crisálida de Luna', la poesía de Felipe J. Piñeiro es el transcurso de un cambio, una metamorfosis, es un retrato de un renovado ser que dialoga de tú a tú con el pasado, presente y futuro.

Es al fin y al cabo un libro en tres, o tres partes de un libro que diferencian tres estados esenciales de cómo entiende o siente su vida, que son la muerte (no literal), la purificación de actos y vida anterior (personal) y el renacer y renovación (volver de nuevo a la vida).

Un libro que no deja de lado las raíces autobiográficas ya conocidas en Felipe, sino que las aposenta y reparte al mismo tiempo que converge con otras vidas y experiencias ajenas a él mismo.

Y es por ello que se internará en el tenebroso territorio de las dudas existenciales donde habita la soledad del yo, tratando de hallar respuesta a las preguntas que todos los mortales nos hacemos cuando el destino nos sitúa ante la encrucijada en que algunas veces, sin saber muy bien por qué, se convierten nuestras vidas.


XIX

Entre los iluminados.
Descendieron los falsos profetas
a través de brumas con éter de mil demonios
donde las malas lenguas iban a morir...
Decían ya no hay forenses de deidades
ni de engaños ni de infiernos,
pues es allí el lugar que viste al sufrimiento
y se entierran las heridas ya sin llantos;
ellos tan solo acompañados
cada uno con su don y su apócrifo vaticinio
su ángel y diablo.


www.felipej.com

lunes, 5 de octubre de 2015

EDAD DE SABIOS por Laura Martínez García.



Tal vez hemos llegado demasiado tarde a la temprana edad de sabios consumidos en labios que no hemos besado, ya lo sabías. Tal vez no sea un éxito el repartir cenizas de ave fénix, esperando que resurjan los vuelos diarios a Estocolmo, por ejemplo. Tal vez esto es un colmo, o la colmena de tus abejas polinizadoras, en panales de rica miel. Tal vez el oso hormiguero sea diabético, quizás la hormiga sea la fragilidad del radio en decúbito supino, esperando que el fémur más largo, sea fuerte de nuevo y no sucumba a la osteoporosis de tu tibia, entre los músculos engarrotados de un calentamiento mal hecho. Tal vez seamos gemelos, rodillas articuladas, corazón auriculado, o lengua ventrílocua. Tal vez seamos sólo anatomía de cuerpos sumergidos en líquidos que desalojamos como principio del alma, que pesa veintiún gramos de neuronas alternativas. Tal vez tú seas alma y yo cuerpo, quizás tú cuerpo yo alma, posiblemente seamos moléculas asociadas, S.A, en la hipótesis asombrosa de esas células nerviosas, que establecen conexiones como si fuesen relaciones, y no lo son, tal vez porque hemos llegado tarde a la temprana edad de sabios consumidos en labios que no hemos sabido besar, pero eso ya lo sabías.

Laura Martínez García


viernes, 2 de octubre de 2015

HOY EN MADRID

SUPERHÉROE por Gsús Bonilla.




Confía en mí
como quien pone sus labios
secos y agrietados
en la estampa de un santo
o en el mármol frío
de la peana del mismísimo Dios, así es su fe

como la de un empresario gordo
en un político afín
como la de éste
en un banquero podrido de dinero

como la de todos ellos
en un hombre corpulento y uniformado
armado sin alma
adiestrado, ciego y sumiso.

Confía en mí
nada más porque soy su padre
y eso es mucho y nada
y más grande que yo, para ella,
no hay nada ni nadie

y todo lo demás que no sea yo
está por debajo
de sus noventa centímetros de altura

y confía en mí, sobretodo
porque tengo las manos suaves y los pies
calientes.

Confía en mí, aunque todavía no sepa
que el miedo que tengo
es a que se le escape el globo

y yo no lo pueda alcanzar.


Gsús Bonilla


jueves, 1 de octubre de 2015

OUTSIDERS por Roberto Ruiz Antúnez.




fuera de la zona de confort no hay teorías ni triángulos isósceles
ni siquiera instrucciones en cuatro idiomas de cómo hacer el amor con trajes
de nylon una noche de luna llena
fuera de la zona de confort se respira se sueña y se fornica
como en un mural de Diego Rivera
danzando alrededor del fuego y la demencia de las flores
no hay un coche alemán ni una casa acristalada en el skyline
fuera de la zona de confort no hay seguridad jurídica
en los besos que transmiten la malaria
fuera de la zona de confort una película situacionista
es proyectada en una pared en blanco
donde sólo se oye constantemente
“nosotros organizaremos la detonación”
fuera de la zona de confort
Demóstenes medita en el centro mismo de las cosas
cuando termina
se saca una a una las piedras de la boca
y se caga en la metafísica con todas sus fuerzas…
fuera de la zona de confort
los días tienen perros que no conocen el hambre
fuera de la zona de confort
unos desconocidos
interrumpen el sermón dominical
y proclaman
la soberanía hermosa y redonda
del otro lado de los espejos…

Roberto Ruiz Antúnez