podría empezar esto diciendo: hoy desperté pensando en ti... creo haber soñado contigo... es curioso...me dormí empalmao y así me desperté, extraño priapismo derivado del recuerdo de tus ojos...
podría continuar diciendo que, gracias a la extracción de esa muela del juicio, estuve tragando mi propia sangre toda la noche... y, al despertar, la sequedad de mi garganta hizo que vomitase mi sangre y mi bilis...
podría decirte que, ante el espejo, la sangre corría por las comisuras de mis labios, inundaba todo el lavabo en una especie de mezcla gelatinosa de restos de nicotina solidificada, bilis y trazos sanguinolentos... y seguía empalmado pensando en ti...
podría sacar algunas conclusiones de esto... pero hoy no juego el palo psicoanalista...
podría....pero si te digo esto, preciosa... me mandas a tomar por el culo sin más...
sin darme tiempo a decirte que hay veces que tengo algo más dentro...
y también pienso en ti.
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Alfonso Xen Rabanal. Fragmento extraído de Crónicas para decorar un vacío.
Ilustración: Bufa in action, por Cusco Vinalia.
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Os reenvío hoy, mis queridos drugos, al blog del hermano Alfonso Xen Rabanal, Bufa para los amigos, Crónicas para decorar un vacío, que es de lo mejorcito que os podéis encontrar en la red, como algunos ya habréis comprobado. La prosa de Alfonso es inconfundible, podría identificarse entre cientos, personalísima, transgresora y torrencial, crítica y subversiva, espontánea y rítmica... A caballo entre la filosofía y el porno, entre lo escatológico y lo metafísico, es, en cada uno de sus registros, una delicatessen para el lector sin complejos. Hijo prediclecto de Satanás y amigo desde la prehistoria tripper, bluesman apasionado, fundador de Vinalia, escritor subterráneo, tripulante, erotómano empedernido, agitador cultural... nuestro queridísimo Bufa está a punto ya de entregar su nuevo libro a Eclipsados... Lo estamos esperando, hermanito. Y un brindis a tu salud !!! v.
2 comentarios:
Este es uno de esos blogs sin los que a uno se le haría la vida más jodida y difícil. Menos mal que Xen está ahí, al pie del cañón, consus historias, para alimentarnos la carne y el espíritu. Se te quiere, Xen, tío.
gracias, tíos...
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