miércoles, 26 de marzo de 2008

LA VIDA NO TIENE NADA QUE VER CON EL CAPRICHOSO SHOW DE LOS PULMONES, por Sonia Fides.


No es por la muerte en sí
sino por el abandono
por lo que el hombre empieza a conocer
el estupor del miedo y su naturaleza

Javier Lorenzo Candel


Si tuviera que escoger un amante entre todos los ingredientes
que escribo a diario en mi lista de la compra,
subrayaría, sin que me temblara el pulso, la palabra cebolla.

Me gustan los misterios,
confiscarle el pasaporte a mi núcleo privado,
ser la cena para cualquier noche desnutrida
y ayudar a los tejados a que se disfracen de boas constrictor
haciendo llamativos ejercicios de rehabilitación
para sus mandíbulas siempre a punto.

No conviene que la madrugada padezca de hambruna
porque el hambre es la más poderosa fabricante de estatuas
y la quietud acaba siempre por evidenciar,
que la vida no tiene nada que ver
con el caprichoso show de los pulmones.


Sonia Fides, del poemario Electra se quita el luto ( Ediciones Vitruvio, en prensa ).

1 comentario:

albalpha dijo...

La cebolla...Sonia siempre tan acertada. Un placer leer siempre a Sonia. Saludos

Alba