impregnada de ti bajo la cuesta hasta mi casa
paseo sonrisas drogadas por la ciudad
no puedo pararme
no me asusta la envidia de las diosas
mientras conserve tu sabor
Déborah Vukušić, de La carne es débil ( inédito ).
37 hijos de Satanás brindan a la salud de Bukowski en un libro que dejará una resaca brutal
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