Cuando desperté estaba
destrozado en un hospital
por haber pasado
un par de largos días
tirado en el estiércol
al borde de la nada.
Con cara de rata inflamada
y una sonrisa insaciable
salí de aquel lugar escuchando
aquello que siempre me decían:
- ¡tú veras lo que haces con tu vida!
Poco o nada quería hacer con ella.
Pero vi que todavía llevaba puestas
aquellas botas que me regalaste
Así que les hice un buen nudo
y las lancé con toda mi fuerza
consiguiendo dejarlas
al segundo intento
colgadas en el semáforo,
ese que hay justamente
enfrente de tu ventana.
Y así, por cojones, fijo
que al verlas dando vueltas
te acuerdas un instante
de lo que siempre decías
cuando te llevaba a casa.
Y espero que al menos
le provoque una carcajada
aunque sea estúpida
a ese comemierdas
que va ahora a tu lado
Y tus padres que me vieron
tantas veces presumiendo
de que tú me las compraste
dirán que a mi cabeza
ya no le llega para más.
Y al ponerse de pronto
el semáforo en rojo
comprendí que no eran
las botas sino el reloj
lo que debía de dejar
para siempre
a la sombra de tu ventana.
destrozado en un hospital
por haber pasado
un par de largos días
tirado en el estiércol
al borde de la nada.
Con cara de rata inflamada
y una sonrisa insaciable
salí de aquel lugar escuchando
aquello que siempre me decían:
- ¡tú veras lo que haces con tu vida!
Poco o nada quería hacer con ella.
Pero vi que todavía llevaba puestas
aquellas botas que me regalaste
Así que les hice un buen nudo
y las lancé con toda mi fuerza
consiguiendo dejarlas
al segundo intento
colgadas en el semáforo,
ese que hay justamente
enfrente de tu ventana.
Y así, por cojones, fijo
que al verlas dando vueltas
te acuerdas un instante
de lo que siempre decías
cuando te llevaba a casa.
Y espero que al menos
le provoque una carcajada
aunque sea estúpida
a ese comemierdas
que va ahora a tu lado
Y tus padres que me vieron
tantas veces presumiendo
de que tú me las compraste
dirán que a mi cabeza
ya no le llega para más.
Y al ponerse de pronto
el semáforo en rojo
comprendí que no eran
las botas sino el reloj
lo que debía de dejar
para siempre
a la sombra de tu ventana.
4 comentarios:
Buen escrito Dioni, da que pensar...
Un cordial saludo.
Preciosa,ya estaba esperando que formaras parte de hankover,me he alegrado mucho,tenias que estar ahí.Un beso muy gordo.
ENHORABUENA
KEBRAN
gracias por ponerme aqui,.....
Publicar un comentario