Bailaron con la Parca
rostro con rostro, bien agarrados a la cintura,
aquellos acelerados jóvenes punk-rockers
en aquellos días no tan lejanos en que los bafles explotaban...
bailando con la Parca, camuflada
en dulce, cálida, húmeda Afrodita,
como si fuera el ultimo baile de la noche,
bailando, follando y bailando sin parar,
como los entregados enamorados que quieren culminar
el ultimo juego sexual de la vida,
bailando y bailando con aquella pantera
bella, asesina, de blanco terciopelo
Fallen Angel de Basquiat me viene a la memoria
el sudor en la piel producido por los focos
mezclado con la sed que venía de las venas amoratadas, agujereadas,
miles de watios, pogo salvaje y caricias químicas,
todo aquello un cóctel aterrador, detonante
todo aquello en las enloquecidas miradas
en los rostros deformados
de aquellos punk-rockers de mi Pueblo
que jamás aparecerán en nuestros libros oficiales de cultura
los acordes de aquel Reggae del vómito*
bien podrían ser la banda sonora de estos recuerdos
al final, después de disfrutar aquella autopista sin salida,
mientras Straight to Hell*, aquella Clash song, sonaba en la furgona,
tuvieron que pagar el peaje a la bella puta de los cuervos,
último peaje para el último viaje
sin necesidad de mirar a las luces de neón
quisiera proclamar a gritos
que el amor y el odio se unían en la misma imagen,
que había un fuego tremendo
sin que hubiera que ponerse con una falsa sonrisa
al lado de las autoridades del momento,
al igual que los modelos que se venden para las fotos oficiales
algunas veces busco a aquellos ángeles caídos
en el dial de la radio de mi corazón,
antes de que la memoria se me oxide para siempre
saber de donde venimos puede ayudar
en esa eterna duda sobre a donde vamos
fallen angels, fallen angels!!
convertidos en bocado de cuervos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario