miércoles, 27 de febrero de 2008

EL W.C. DE LA CONCIENCIA, por Lucía Bosca.


En los baños públicos contorneo mis ojos con un negro negro

que hace mis ojos más negros

sobre todo porque son

marrones.

Mientras el lápiz pasea suavemente sobre la línea perfecta

de mis grandes ojos que en verdad son

pequeños

pienso en el ruido, en los pasos,

en el mundo que continúa girando tan estresado

como lo estaba yo hace unos segundos,

recuerdo el calor del horno y el suelo de parqué de mi ático en Roma,

invento alguna metáfora que flota sobre el caldo de mi dolor

mientras niñas tontas se ríen de tonterías, entran y salen del baño,

abren la puerta, mean, se lavan las manos, se ríen y salen.

Abren la puerta, mean, se lavan las manos, se ríen y salen.

Se lavan las manos

y ninguna estira de la cadena.


EL W.C. DE LA CONCIENCIA

Lucía Bosca, poema inédito.