Si podéis acceder a él, no dejéis de deleitaros con este libro sobre gladiadores mexicanos de Malcom Wenville, con el que Hank, al salir del hipódromo, habría disfrutado de lo lindo. Si no, visitad esta página, donde podréis haceros una idea de cómo se las gastan estos bizarros señores del ring: http://www.luchaloco.com/ Si alguien pelea a la contra sobre el cuadrilátero, no cabe duda, son estos rocambolescos frikis marcianos embozados en sus uniformes psicotrónicos. Desde aquí, un gran copazo a su salud y a la de todos los hermanos mexicanos que a diario visitan nuestro blog. v.
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