lunes, 21 de enero de 2008

ANNABEL LEE, 1 poema de Edgar Allan Poe.


Sucedió hace muchos, muchos años,

en un reino junto al mar.

Allí vivía una doncella conocida

por el nombre de Annabel Lee;

y esa doncella no vivía con otro pensamiento

que el de amarme y que yo la amara.


Yo era un chiquillo y ella una chiquilla,

en aquel reino junto al mar:

Pero nos amábamos con un amor que era más que amor -

mi Annabel Lee y yo -.

Con un amor que los alados serafines del cielo

envidiaban de nosotros.


Y éste fue el motivo por el que, hace mucho tiempo,

en aquel reino junto al mar,

un viento llegó desde una nube, helando

a mi hermosa Annabel Lee;

entonces vino aquel hidalgo pariente suyo

y la apartó de mi lado,

para encerrarla en un sepulcro

en aquel reino junto al mar.


Los ángeles que no eran tan felices en el cielo,

nos tenían envidia

- ¡ Sí ! - éste fue el motivo ( como toda la gente sabe,

en aquel reino junto al mar )

para que el viento viniera por la noche desde la nube,

helando y matando a mi Annabel Lee.


Pero nuestro amor era mucho más fuerte que el amor

de aquellos que eran más viejos que nosotros

- de muchos que sabían más que nosotros -

y ni siquiera los ángeles allá arriba en cielo,

ni los demonios en las profundidades del mar,

podrán nunca separar mi alma del alma

de la hermosa Annabel Lee.


Jamás brilla la luna, sin que yo sueñe

con la hermosa Annabel Lee;

jamás salen las estrellas, sin que yo sienta los brillantes ojos

de la hermosa Annabel Lee;

y así, durante toda la noche, permanezco tendido al lado

de mi querida, mi querida, mi vida y mi novia

allá en el sepulcro junto al mar

en su tumba junto al mar sonoro.


Edgar Allan Poe, de Poesía Completa. Traducción de Arturo Sánchez ( Ediciones 29, 1974 ).

Aún se me pone en vello en pie cada vez que releo este impresionante poema de nuestro grandísimo Edgar Allan Poe, padre indiscutible de la turbulencia y las resacas. Una historia de amor profundo y gótico de las que nunca se olvidan, y una inyección de nostalgia para arrancar motores este soleado lunes de invierno helado. v.

3 comentarios:

  1. precioso poema, sí señor, y me vienen a la mente aquellas notas de radio futura... hace muchos muchos años en un reino junto al mar, habitó una señorita cuyo nombre era Anabel Lee... qué bonito!

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  2. ¨Así,durante la marea nocturna recostado al lado de mi adorada,mi querida,mi vida y mi prometida;en su tumba junto al mar en su tumba que se eleva a las orillas del sonoro mar¨

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  3. no se puede sentir un amor mas grande, mas intenso y que duela tanto su perdida por una persona. me encanta

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