viernes, 31 de mayo de 2013

OPTIMÍSTICO: Iñaki Echarte Vidarte.

Iñaki Echarte Vidarte
firmará ejemplares
de su último poemario
Optimístico
(Baile del sol, 2013)
31 de mayo, 19-21h: FNAC, caseta 41-42
9 de junio, 18-19h: La Marabunta, caseta 118
y regalará a todo aquel
que se acerque
un microfanzine
exclusivo,
numerado
y nominal:
VerS.O.S.

jueves, 30 de mayo de 2013

EL BAR DE LEE: David Pérez Vega.


EL MIRLO

Todo arte es completamente inútil.

Oscar Wilde



Cuando ondulante como en alta mar

arrastro por las baldosas del paseo

mi tempestad bajo el túnel de álamos, sábana

rumorosa de la noche húmeda de viento,

solo, a las cinco de la mañana

concentrado en la tristeza continua de cada paso

y en la retina los finos tirantes de sus vestidos,

canta el mirlo a las cinco de la mañana

tras la lluvia y la ciudad en invierno,

su canto de amor fuera de temporada

destinado a quién sabe qué amantes dormidas,

hermoso como sólo pueden serlo las cosas inútiles,

me detengo.



Escucho el poderoso canto del mirlo.

El viento sopla, mi carne se estremece,

no reconozco esta sensación que me invade

y pienso que tal vez se parezca a la felicidad,

sonrío al vacío, muy quieto ahora

busco al mirlo, poeta del invierno,

sin encontrarlo en las frondas de la noche.


David Pérez Vega, de El bar de Lee (Baile del sol, 2013) poemario doble formado por Móstoles era una fiesta (1998) y El Calvo del Sonora (2008).

Días de firma en la Feria del Libro de Madrid:

Viernes 31 de mayo, Caseta 118, 19.00 - 21.00 h.
Miércoles 5 de junio, caseta 37, 18.30 - 20.00 h

DURALEX by Karmelo Iribarren.


Tenía siete años cuando una monja me partió un plato duralex en la cabeza. El delito: decir que no pensaba comerme aquellas patatas, que estaban malas. Y algo de verdad había en mis palabras, no sé si expresada del todo bien. El asunto era que en la cocina tenían que pelar patatas para ciento cincuenta, por lo que empezaban a primera hora. Las patatas peladas iban a un gran cubo, donde el oxígeno las oscurecía dándoles un aspecto horrible. Los añicos de cristal cayeron en mis patatas, mezclados con algo de sangre. No me comí las patatas, no al menos esa vez. Aquella pobre mujer estaba enferma, de hecho acabó en el psiquiátrico. En cuanto pude analizar el hecho, diseccionarlo, el poco odio que pudiera albergar hacia ella se esfumó. Años después me pidió perdón. Me dejó una cicatriz, ahí arriba. La primera de las muchas que me han ido dejando de recuerdo las mujeres. Pero esa ya es otra historia...

Karmelo Iribarren

jueves, 23 de mayo de 2013

EL EXPRESIONISMO POÉTICO DE ÁNGEL GONZÁLEZ GONZÁLEZ



La obra pictórica de Ángel González, realizada en diferentes técnicas mixtas, óleo sobre tela y otros materiales, se asienta en un expresionismo poético de raíz figurativo que enlaza con sus preocupaciones existenciales, composiciones abstractas con elementos e iconismos, autorretratos, retratos de pensadores y filósofos como Friedrich Nietzsche, entre otros, buceando en los paradigmas de la existencia.
Un expresionismo vibracional, energético, que desestructura para volver a componer. Deconstruye en parte para retornar a construir indicios, huellas, situaciones, evidencias, acciones y temáticas.
Sus personajes son reflexivos, incluso los desnudos femeninos poseen un aura dorada, sus autorretratos son indagatorios, conectando con el estado de ánimo con que se encuentra en el momento de hacerlos, a pesar de la corta diferencia de fechas en que están realizados.
Hay una visión general que puede inducirnos a reflexionar activamente sobre la actualidad, pero, también, sobre su propia realidad.
Es un curioso innato, que bucea e indaga constantemente, que interconecta con pensamientos sobre el existencialismo, el ser humano-Dios o el Dios-ser humano, el ser humano como punto central de universo o como el desecho humano por excelencia.
Es un creador de estadios de la consciencia, de estados mentales que vehicula a través de sus personajes.
Su obra está nutrida por técnicas mixtas, relieves, capacitando a la materia para convertirse en protagonista de acciones y momentos, determinando cambios y transformando situaciones.
Su intención es aportar ironía, optimismo, desestructuración y reflexión.
Es un creador que pone el dedo en la llaga en una realidad que no es tan bella y estética como se pueden pensar algunos. Se trata de incidir en el marasmo de voluntades, en las contradicciones humanas, en el dualismo, reflejando todo eso, para mostrarnos la dialéctica de la vida, la eterna disquisición y voluntad de ir más allá de lo uniforme, para encuadrarse en lo voluntarioso y en el cambo que se avecina.
Pero, en principio, le interesa captar el momento poético de todo lo que refleja, dejando la duda para el espectador y la interpretación de lo que hace también.
Trabaja, corre, hay prisa, todo veloz, cada instante es un momento del ambiente, del segundo y de la determinación del cambio. Todo es transformación, la polarización fluctúa. Él lo refleja porque es psicólogo de sí mismo.


Joan Lluís Montané
De la Asociación Internacional de Críticos de Arte (AICA)


PUBLICIDAD. Esteban Gutiérrez 'Baco'





No necesito disparar
para sentirme seguro,
ni necesito dar voces
para imponer mi criterio.


No necesito seducir
para creerme querido,
ni necesito hacer fuego
para llamar la atención.


No necesito todo eso
por lo que la mayoría de la gente
se esfuerza.


Ni dinero ni coche
ni vivienda en propiedad
ni caja fuerte de siete pulgadas
ni banco (¡ladrones!)
ni televisión de plasma
ni robot de cocina
ni vacaciones en el Caribe
ni viajar a Nueva York
ni comer en restaurantes pijos
ni zapatos de Manolo
ni ropa de esa que enseña la etiqueta
ni teléfono
de última
generación.


No lo necesito.


No.



Bacø, 2013

viernes, 17 de mayo de 2013

AÚN SE PUEDE


Ante el intento de apropiación de las palabras por parte del poder político y económico, ante la manipulación a la que son sometidas disponiendo a su antojo el orden de éstas para crear las frases disparatadas con las que nos disparan cada día, ante la mentira y la corrupción que se han adueñado de la cotidianidad mientras el eufemismo se normaliza en el repertorio retórico de quienes nos gobiernan», un grupo de poetas leoneses se reúne hoy en el bar Santo Martino para demostrar que Aún se puede «llamar a las cosas por su nombre». Leerán poemas Abel Aparicio, Luis Miguel Rabanal, Víctor M. Díez, Carlos Huerta, Rafael Saravia, Jorge Pascual, MJ Romero, Toño Morala, Ildefonso Rodríguez, Silvia D. Chica, Felipe Zapico, Rosario Granell, Vicente Muñoz y Eloísa Otero.


lunes, 13 de mayo de 2013

domingo, 12 de mayo de 2013

1 POEMA de María Couceiro.



Me siento
frente al espejo
y es mentira.
No vas a llegar a tiempo.
Capa tras capa quiero
un siempre
he roto los cristales
que rodeas con las manos.

María Couceiro

MOSCAS SOBRE LA CAMA por JOYCE MANSOUR.



Moscas sobre la cama
en el techo en tu boca en tus ojos
acostado sobre ellas con la sábana hasta el cuello
el hombre impotente astuto ignorante
Déjame la piel
Déjame el vientre intacto.

*

Quiero mostrarme desnuda ante tus ojos melódicos.
Quiero que me veas gritar de placer.
Que mis miembros doblados por un peso excesivo
Te empujen a cometer actos impíos.
Que los finos cabellos de mi cabeza ofrecida
Se enganchen en tus uñas curvadas de furor.
Que te mantengas de pie ciego y creyente
Contemplando desde arriba mi cuerpo desplumado.

*

La membrana rosa
que a pesar de sus desgarros
Oculta mi alma mestiza y sus sueños herrumbrosos
Vibra porque tu voz viaja.

*

Es preciso que bese tus pies antes de darme al mundo
Es preciso que pecador yo peque hasta la bestialidad
Para olvidarme de todo para recomenzar todo
Para aprender a esperar.


Joyce Mansour

viernes, 10 de mayo de 2013

HOY ¡NO TE CORTES!


Foto: El viernes 10 de mayo "NO TE CORTES" en El Dino, con Miguel Ángel Cortés y con Bacø


Después de tanto tiempo en esto de la literatura, cumplo la promesa que hice y con 50 tacos ofrezco una antología con mis poemas. Se llama (por el momento) NO TE CORTES, y verá la luz durante unos minutos el viernes 10 de mayo. Luego, como las flores del hibisco, morirá, porque si se publica será bastante diferente a lo que el viernes podréis escuchar.

Para esta perecedera aventura me acompañara con su guitarra y su voz de bluesman  Miguel Ángel Cortés. MAC ha sido cantante, guitarrista y compositor de bandas cañeras como Over Load, y más recientemente de proyectos cercanos al blues y al jazz como Killing Jazz y, ahora, Crazy Cabin. Nos ofrecerá temas de su repertorio personal, muy unidos a los poemas que recitaré.

Estamos con los ensayos, y creo que será una bonita noche.

VIERNES 10 DE MAYO
21:00 HORAS
El dinosaurio todavía estaba allí

NO TE CORTES

 BACØ,  poemas 
& MAC, bluesE


Después de tanto tiempo en esto de la literatura, cumplo la promesa que hice y con 50 tacos ofrezco una antología con mis poemas. Se llama (por el momento) NO TE CORTES, y verá la luz durante unos minutos el viernes 10 de mayo. Luego, como las flores del hibisco, morirá, porque si se publica será bastante diferente a lo que el viernes podréis escuchar.

Para esta perecedera aventura me acompañara con su guitarra y su voz de bluesman Miguel Ángel Cortés. MAC ha sido cantante, guitarrista y compositor de bandas cañeras como Over Load, y más recientemente de proyectos cercanos al blues y al jazz como Killing Jazz y, ahora, Crazy Cabin. Nos ofrecerá temas de su repertorio personal, muy unidos a los poemas que recitaré.

Estamos con los ensayos, y creo que será una bonita noche.

VIERNES 10 DE MAYO
21:00 HORAS
El dinosaurio todavía estaba allí
C/LAVAPIÉS 8

¡NO TE CORTES!

EL ESCARMIENTO. Miguel Sánchez-Ostiz

El_Escarmiento

Esta mañana, por fin, sale de la imprenta El Escarmiento. Comencé a escribir esta novela (por lo que tiene de invención) o crónica o texto híbrido, hace ocho años, en enero de 2005, para la editorial Espasa Calpe, que era la mía en aquellas fechas. Luego las cosas se torcieron, se cruzaron otros trabajos, perdí mi editor, cambié varias veces de dirección narrativa, escribí distintas versiones para al final abandonar el proyecto.
Así fue hasta el verano de 2011 en que a raíz de una visita que hice al fuerte de San Cristóbal, en compañía de familiares de víctimas del escarmiento pergeñado por Mola y los suyos, retomé el trabajo interrumpido. Se estaba haciendo tarde, decían los forenses que abrían las fosas. Sí, se hacía tarde, para casi todo, hasta para los propios empeños, pero a pesar de que el presente se nos ha echado encima de mala manera y nos zarandea, la Guerra Civil y sus consecuencias están más vivas, más presentes, más hechas trinchera de discordia que nunca. No hay verdadera voluntad de conciliación o esta es cansina, de compromiso, a mala cara. Se suceden las noticias relacionadas con la incomodidad que suscita la memoria de esa parte de nuestra historia, con la voluntad gubernamental de no remover y no dejar remover, y con los atropellos. Lo dicen los historiadores que se ocupan de este asunto sin ánimo de halagar a los herederos de los vencedores de la guerra. El derribo del juez Garzón fue me temo la última oportunidad oficial de llevar al terreno de la justicia los abusos y crímenes cometidos al amparo del bando de guerra del general Mola y de la leyes y no leyes dictadas a continuación por los sublevados.
¿Estoy satisfecho con el trabajo realizado? No, claro, por varias razones. Al margen de que raras veces lo estoy, la razón fundamental es que no está acabada, que es solo la primera parte de un fresco más amplio que, por lo que concierne a la guerra, llega hasta junio de 1937; y hasta hoy mismo por sus consecuencias y la forma de vivir su recuerdo. Eso sí, temo defraudar a quienes, como decía el otro día Francisco Etxeberria, se merecen actos que impliquen verdad, justicia y reparación; gente en la que he pensado mientras escribía. Tal vez no haya llegado muy lejos. No será por no haberlo intentado. Las condiciones de trabajo no han sido las óptimas. Este no es un relato cualquiera. Es más que posible que requiera un distanciamiento que yo no he conseguido, al revés. No es el libro definitivo. No tiene esa pretensión. No soy el que más sabe y no pretendo sentar cátedra de nada. Es una visión, la mía.
Sé que es un libro que puede resultar conflictivo porque su materia lo es, al menos en donde vivo, tanto en relación a los protagonistas de aquel tiempo, como a los de ahora. Sé que va a gustar más a unos que a otros, porque de unos y de otros se trata.
Y sé que, como dice el narrador de El Escarmiento, no es lo mismo escribir de lo sucedido entonces en Manhattan o en Madrid, a cubierto, que en el escenario donde se conspiró, donde se alzaron militares y requetés, a la vista de los herederos de los autores de los abusos; y tampoco es lo mismo hablar de estos desde lejos, que cuando la convivencia con ellos, buena o mala, sobre todo esta, es forzosa. En esto poco engaño cabe, pero como repite a menudo el narrador y los suyos: “¡Moriremos nosotros también!”. Ya iremos viendo. Y sobre todo… a cierta edad, poco importa. La suerte estuvo echada hace mucho. Lástima no haberse dado cuenta antes.

Miguel Sánchez-Ostiz
http://vivirdebuenagana.wordpress.com/2013/05/10/el-escarmiento-2/

jueves, 9 de mayo de 2013

LIMÓNOV, DE EMMANUEL CARRÈRE, según MARIO CRESPO


La biografía novelada del hombre que da título al libro, Eduard Limónov, escritor ruso ciertamente excéntrico, le sirve al autor como excusa para narrar una vida mucho más apasionante que la de su biografiado; la de la Gran Rusia. De alguna manera, el personaje de Limónov –que verdaderamente es todo un personaje; un auténtico majadero quijotesco- funciona como un McGuffin en el cine negro; sirve para hacer avanzar la trama sin tener una implicación decisiva en ella. Al personaje de Limónov le ocurre igual: sirve para retratar la Rusia moderna a lo largo de los últimos setenta años, pero no tiene influencia alguna en ella (aun habiéndolo intentado por todos los medios).

Aunque el texto tiene mucho ritmo, la voz narrativa me parece lo más flojo del conjunto, sobre todo por la postura que toma el narrador: Carrère pretende ser imparcial e intenta empatizar con todos los puntos de vista posibles a fin de justificar las acciones de su héroe, pues la vida de Limónov está plagada de contradicciones (ha combatido junto a los Tigres de Arkan, pero también ha liderado un partido bolchevique en época postperestroika), hecho que provoca que el relato se pierda en un limbo de neutralidad. Sin embargo, aunque desde mi punto de vista este hecho lleve al texto a perder fuerza, tiene cierta lógica, pues las contradicciones de Limónov demuestran que los polos opuestos de la política se tocan, que el fascismo y el bolcheviquismo no están tan lejos como pretenden hacernos creer quienes usan constantemente los términos izquierda y derecha como conceptos absolutos.

Eduard Limónov, nacido como Savienko, se inicia en la bohemia rusa a través de los círculos underground de su ciudad natal. Luego se mudará a Moscú, huirá a los Estados Unidos, vivirá en París, luchará en los Balcanes del lado serbio, volverá a Rusia como opositor de Putin. También nos cuenta Carrère, basándose sobre todo en los relatos autobiográficos de Limónov, la activa vida privada del poeta, especialmente la amorosa. Pero, como decía al principio, lo realmente apasionante del libro es la historia de Rusia a través de las aventuras del poeta Limónov. Durante el proceso de lectura, uno va a atravesando Rusia y parte de Europa y Nueva York, y hasta alcanza a entender un poco mejor qué ocurrió realmente en los Balcanes a principios de los 90. Lo cierto es que Rusia, esa gran nación, ha sido y aún hoy sigue siendo una desconocida para el mundo occidental, y este libro sirve, entre otras cosas, para que el lector buceé sin oxígeno por las sucias aguas de la URSS profunda, un sistema socioeconómico que no dista mucho del actual sistema de castas -al mismo tiempo pro y antioligárquico- de la, teóricamente democrática, Federación Rusa.


Limónov, de Emmanuel Carrère. Anagrama, 2013. [Traducción de Jaime Zulaika]. Prix des Prix 2011, Premio Renaudot, Premio de la Lengua Francesa. 

http://mariocrespo.blogspot.com.es/

VERANO AZUL, por David Benedicte



Federico (Engels), Palmiro (Togliatti),
Rosa (Luxemburgo), Victoria (Kent),
Antonio (Gramsci), Carlos (Marx),
Dolores (Ibárruri) y Federica (Montseny).

Son legión los ancianiños.

Aviejadolescentes impúbiscos
que recorren Nerja
al timón de bicicletas prostáticas
mientras entonan cánticos cósmicos.

Siempre en busca de quien se ofrezca al hambre de los zombis.

Ferrandías.
Tórridas ferrandías.
Túnidas. Halitósicas. Teleseriadas. Asalmonadas. Suprarrenales.

No los moverán.
Nadie se atreverá a mover sus descuajaringados pellejos.
Sus cardiopatías centenarias anegadas de nostalgias submarinas.
Chanquete (Marx) pesca ramos de claveles mustios con sus manos.
Julia (Luxemburgo) escupe brochazos con óleos de pintora depre.
Piraña (Gramsci) engulle transatlánticos en bulímicas sentadas.
Tito (Engels) asume que en la Mirinda exprimen frutas del Paraíso
y que la URSS es un western del eastern.

Un weastern.
De ahí la admiración declarada de Stalin hacia Gary Cooper,
pionero que se adentraba en los graneros libre de servidumbres.

Los ancianiños se beben tu fiebre y el semen dulzón de los muertos.
Se protegen así del temporal.

No los moverán.
Nadie se atreverá a mover sus burbujeos en lo más alto del podio.
Son unos sportmen sublimes.
Solos ante la inmensidad del capital.
Impávidos al murmullo terrible del lumpenproletariado.

No los moverán.
No los abolirán. No los expropiarán. No los confiscarán.
No los centralizarán. No los disolverán. No los suprimirán.

Los ancianiños.
Siguen siendo una amenaza para los burgueses del mañana.



David Benedicte. Poema extraído de Poemarx (Premio Internacional de Poesía 'Ciudad de Badajoz' 2012)

jueves, 2 de mayo de 2013

CANCIONES DE LA GRAN DERIVA: 2ª Edición en Origami.

Abril 2013

Libro:

Ebook:


Canciones de la gran deriva, es un poemario que no dudaría en calificar de visionario ya que los temas de que trata –la crisis que nos asola sin ir más lejos- siguen vigentes a fecha de hoy, en el momento de escribir estas líneas, quizá incluso más vigentes que cuando fueron escritos, cualidad que solo poseen los grandes libros, y el hecho, incuestionable, inapelable, de que estos poemas hayan superado la prueba del tiempo dice más, mucho más en su favor y a favor de su autor de lo que yo mismo soy capaz de expresar.

David González