NO HAY VENCEDORES NI HÉROES
No hay vencedores ni héroes.
Nadie ante quien claudicar.
No me pidas que baile un aurresku de bienvenida.
Yo no he matado a nadie.
Tampoco he torturado,
ni amenazado.
Aunque con pistola,
aunque detenido,
aunque con corbata
nadie está a salvo de la catástrofe.
De la barbarie.
De la atrocidad de ser humano.
YO TAMBIÉN
Yo también
me enfrenté a la policía.
Yo también
grité "policía asesina".
Yo también
sentí la misma rabia.
Yo también me sulfuré.
Yo también
luché hasta el final.
Tuve claro cuál podía ser el final.
Por eso,
antes que fuese demasiado tarde, lo dejé.
Estos dos poemas (que hemos copiado del blog Perdóname, pero te amo, de David González, pertenecen al libro Azken bala/La última bala del navarro Hasier Latrretxea. Lo edita Point des lunettes y la traducción es de Ángel Erro.
un libro magnífico!
ResponderEliminarme lo leí de una tacada!
impresionante!